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Los niños y niñas, auténticos protagonistas del programa.

Clausura del programa Educa en Valores.

Alrededor de 28 niños y niñas junto con sus dos profesoras celebraron en la mañana del martes la clausura del programa "Educa en valores", organizado por la concejalía de bienestar social del Ayuntamiento de Miguelturra, a través de los servicios sociales.

A partir de las 11:00 horas, en las dependencias del edificio del antiguo colegio El Pradillo, profesoras y alumnos se reunían en una última sesión para participar en la "fiesta sorpresa de clausura" consistente en una serie de actividades enfocadas en su totalidad a la celebración de estas fiestas navideñas. Los niños y niñas, auténticos protagonistas del programa, participaron tanto en las actividades de decoración de aula así como en la preparación de concursos como cartas a los Reyes Magos o la elaboración de felicitaciones navideñas, premiando su esfuerzo a través de una serie de regalos que se hicieron entrega en este acto.

Las educadoras transmitían la gran expectación y la ilusión de los niños por esta fiesta, "ya que después de seis meses de trabajo los chicos esperaban estas fiestas navideñas a modo de recompensa, no sólo por lo que entrañan dichas fiestas sino por la realización de actividades fuera del contexto escolar". Además, hacían un balance muy favorable de estos meses de programa: "sobre todo en lo que respecta al trabajo desarrollado por los niños que se ha visto reflejado en el aumento de su rendimiento escolar y en la adquisición de hábitos de estudio".

Por otra parte, en lo que respecta a la convivencia, las profesoras destacaban que había sido bastante buena teniendo en cuenta que se ha contado con grupos de edades muy dispares, puesto que "han sabido adaptarse a las circunstancias", y concluían señalando que "el proyecto "Educa en valores", no sólo ha respondido a las expectativas de los niños, sino que podemos decir que contamos con el apoyo de los padres para la continuidad del mismo".

El programa se iniciaba el pasado mes de julio, por segundo año consecutivo, con el objetivo de fomentar el interés educativo en los jóvenes que sufren mayores problemas de adaptación y éxito en el sistema escolar. Las necesidades de educación, como parte fundamental del desarrollo íntegro y global de las personas, y la importancia que las familias juegan en el proceso han sido los factores determinantes para ofrecer esta actividad complementaria al curso escolar, dirigida especialmente a familias con riesgo de inadaptación social.

Durante estos meses, el taller se ha desarrollado en sesiones grupales a través de programas individualizados adaptados a las carencias de cada niño. Entre los objetivos se encontraba, además de intentar modificar las condiciones que generan cualquier tipo de inadaptación social o educativa en el ámbito familiar, el proporcionar a los padres la información y orientación necesaria para que puedan valorar y educar a sus hijos adecuadamente.