Según Amador Calafat, psiquiatra y director de la revista Adicciones, en las últimas décadas se ha extendido "la sensación de que el cannabis era inocuo. Y parecía que el que no se tomaba un porro no se enteraba de lo que era bueno".
El "Binge Drinking" provoca daños cerebrales y alteraciones que afectan a la memoria y la capacidad intelectual, según las conclusiones destacadas tras la celebración de la Primera Jornada de Divulgación Científica "la ciencia al alcance de todos".
Es una de las principales conclusiones del "Estudio longitudinal de la evolución del consumo recreativo en alumnos universitarios", realizado en la UAL entre 310 alumnos de primer curso.