Taller de corresponsabilidad en Miguelturra
El Centro de la Mujer de Miguelturra está desarrollando, en el Instituto de la localidad, Campo de Calatrava el "Taller de corresponsabilidad". El taller se está desarrollado en la biblioteca del Instituto y está dirigido exclusivamente, en esta ocasión, a los alumnos de primero y segundo de bachillerato que son los que están a punto de comenzar sus estudios universitarios.
Impartido por tres profesionales del Centro de la Mujer, Conchita Movilla, técnico de Empleo, la psicóloga, Carmen Rodríguez, y Pilar Rodrigo, técnico de Igualdad y responsable de los contenidos. Además, se cuenta con la coordinación de la trabajadora social del Instituto y con los tutores, ya que el taller se imparte en horas de tutoría. Por tanto, dura una hora y los contenidos se ciñen a este tiempo que coincide con la tutoría.
Rodrigo explica que esta actividad, como su propio nombre indica, es "compartir con". El taller intenta trasladar a los chicos el concepto de que, cada una de las personas que vivimos en sociedad, seamos responsables de nuestros actos y colaboremos en todo aquello que suponga convivir con tu pareja, con tus hijos, con tus padres, compañeros etc. En definitiva "ser responsable contigo mismo y con los demás".
Aunque este concepto parezca algo muy obvio, la técnico en Igualdad, explica que "al analizar los comportamientos de los jóvenes y sus actitudes te das cuenta que a la hora de llevarlo a la práctica deja mucho de desear".
Los jóvenes participan en el taller con interés, discutiendo y debatiendo pero, "te das cuenta de cómo se repiten comportamientos estereotipados, los chicos, explica Pilar Rodrigo, todavía tienen asumido que la capacidad de decisión es suya, cuando aportaban sus ideas lo hacían con más confianza, sabiendo que ellos pueden decidir, una actitud muy diferente a la de las chicas". "Por tanto este taller trata de romper estos roles".
El taller tiene el objetivo principal de inculcar respeto por uno mimo y por los demás, "hay que ser persona antes que chico o chica, hay compartir". El taller, partiendo de conceptos tan básicos como explicar qué es el sexo y qué es el género pretende defender a la persona. Así, se les inculca la igualdad de oportunidades en el ámbito de la vida privada y laboral para no estar sometidos por ninguna de las dos partes. "Se pretende que todo el mundo hombre o mujer tengan los mismos derechos sin diferencia de trato por ser chico o chica y a partir de este concepto nos desarrollamos libremente en nuestro ámbito privado público. Esto significa ser corresponsable.
Impartido por tres profesionales del Centro de la Mujer, Conchita Movilla, técnico de Empleo, la psicóloga, Carmen Rodríguez, y Pilar Rodrigo, técnico de Igualdad y responsable de los contenidos. Además, se cuenta con la coordinación de la trabajadora social del Instituto y con los tutores, ya que el taller se imparte en horas de tutoría. Por tanto, dura una hora y los contenidos se ciñen a este tiempo que coincide con la tutoría.
Rodrigo explica que esta actividad, como su propio nombre indica, es "compartir con". El taller intenta trasladar a los chicos el concepto de que, cada una de las personas que vivimos en sociedad, seamos responsables de nuestros actos y colaboremos en todo aquello que suponga convivir con tu pareja, con tus hijos, con tus padres, compañeros etc. En definitiva "ser responsable contigo mismo y con los demás".
Aunque este concepto parezca algo muy obvio, la técnico en Igualdad, explica que "al analizar los comportamientos de los jóvenes y sus actitudes te das cuenta que a la hora de llevarlo a la práctica deja mucho de desear".
Los jóvenes participan en el taller con interés, discutiendo y debatiendo pero, "te das cuenta de cómo se repiten comportamientos estereotipados, los chicos, explica Pilar Rodrigo, todavía tienen asumido que la capacidad de decisión es suya, cuando aportaban sus ideas lo hacían con más confianza, sabiendo que ellos pueden decidir, una actitud muy diferente a la de las chicas". "Por tanto este taller trata de romper estos roles".
El taller tiene el objetivo principal de inculcar respeto por uno mimo y por los demás, "hay que ser persona antes que chico o chica, hay compartir". El taller, partiendo de conceptos tan básicos como explicar qué es el sexo y qué es el género pretende defender a la persona. Así, se les inculca la igualdad de oportunidades en el ámbito de la vida privada y laboral para no estar sometidos por ninguna de las dos partes. "Se pretende que todo el mundo hombre o mujer tengan los mismos derechos sin diferencia de trato por ser chico o chica y a partir de este concepto nos desarrollamos libremente en nuestro ámbito privado público. Esto significa ser corresponsable.