Miguelturra, Daimiel y Poblete son las localidades que más pedidos realizan de huerta ecológica a Herencia
Según informa el diario digital www.eldiadeciudadreal.com, una de las quejas constantes de los productores del sector primario es que los distribuidores les pagan sus productos a precios tan bajos que no pueden ni cubrir los costes de producción, para luego venderlos en supermercados y tiendas de comestibles por un importe muy superior, que les permite sacar un margen desorbitado.
En la Asociación de Hortelanos de Herencia no son ajenos a este problema; al contrario, son bien conscientes de la dureza del trabajo de sus asociados. Por eso, desde hace más de un año, coordinan un servicio de reparto a domicilio de productos variados de la huerta herenciana, centralizado a través de la página www.sabeyhuele.com y enmarcado en el proyecto ARCO (Agricultura de Responsabilidad Compartida) de la organización agraria COAG.
A través de la dirección de correo pedidos@sabeyhuele.com, o del teléfono 926 570 158, los clientes pueden hacer el pedido de una cesta de productos variados, cuya composición exacta viene indicada en la página antes indicada, y varía cada cierto tiempo. El precio es de 15 euros, con portes gratuitos; por un suplemento adicional variable, también es posible añadirle productos extra, como aceite de oliva o queso, tanto de cooperativas de Ciudad Real como de Toledo.
El Origen de la Idea
El responsable de ARCO en Herencia, Ángel Úbeda, explica que a principios de 2008 tuvieron conocimiento de que los agricultores de varios puntos de España habían puesto en marcha este sistema para vender directamente al público sin pasar por los grandes distribuidores. A finales de mayo de ese mismo año visitaron uno de esos lugares, Bollullos del Condado (Huelva) para ver esa iniciativa en acción; contentos con el resultado, aprobaron en asamblea sumarse a la red ARCO.
Durante el resto del año, estuvieron preparando los diversos aspectos de este servicio a domicilio, planteando cuestiones como la posibilidad de incluir productos fuera de temporada (cultivados en invernadero). El servicio entró por fin en funcionamiento en las Navidades de 2008.
Desde entonces han ido creciendo poco a poco, haciendo repartos no sólo a la provincia, donde ya tienen una base de en torno a 200 clientes regulares, sino también a Toledo, donde la clientela habitual asciende a 300 compradores, o a Madrid, donde llega a 250. Dentro de la provincia, las localidades de las que les llegan más pedidos son Miguelturra, Poblete y Daimiel.
Aspectos a mejorar
A pesar de este éxito, Úbeda reconoce que hay aspectos que hay que mejorar: el precio actual, por ejemplo, estaba pensado como parte de la promoción inicial del servicio, pero se ha mantenido demasiado tiempo, por lo que en algunos repartos se ha perdido dinero. Asimismo, la promoción hasta ahora ha consistido en el ‘boca a boca’, lo que es insuficiente para que la clientela crezca a un buen ritmo.
En esta situación, reconoce el coordinador de ARCO, influye también la propia actitud de los horticultores herencianos, que no están acostumbrados a seguir métodos de actuación empresariales, como pudiera ser un buzoneo para promocionar el servicio, y son reticentes a aplicarlos por no estar familiarizados con ellos.
Además de esto, el trato con los distribuidores les ha acostumbrado a ofrecer sus productos a un precio más bajo del que sería justo, algo que ha influido en el mantenimiento de los bajos precios. Pese a ello, desde la asociación estudian poner fin al precio promocional en este mes, y compensarlo con medidas como descuentos en función del número de cestas a dejar en una parada de reparto, establecer portes distintos según población, y exigir el pago previo a la realización del servicio para evitar los casos de impago al entregar la mercancía.
Es esa falta de ímpetu comercial y de valoración del propio producto lo que, en último término, pretende corregir este servicio, pues su objetivo último es garantizar el nivel de renta de los horticultores, reducir el trabajo necesario para ello, mejorar de este modo su calidad de vida y facilitar el relevo generacional haciendo más viable y atractiva la actividad a los ojos de los jóvenes; de lo contrario, sentencia Úbeda, la huerta herenciana se morirá.