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Miguelturra analiza el fenómeno del "chemsex" y su abordaje integral en una jornada que unió redes de adicciones y salud mental

El Centro de Exposiciones y Representaciones Escénicas (CERE) de Miguelturra acogió el miércoles, 10 de diciembre, la jornada titulada 'Uniendo Redes de Adicciones y Salud Sexual: Jornada sobre el abordaje del ChemSex'. Organizado por el Ayuntamiento de Miguelturra y el Consejo Municipal de Juventud, el encuentro reunió a expertos sanitarios, trabajadores sociales y representantes institucionales para debatir sobre esta problemática de salud pública.

La actividad comenzó a las 17:30 horas con la presentación oficial de las jornadas, que corrió a cargo de José Manuel Sánchez-Mateos, trabajador social y técnico de Juventud y Prevención de Drogodependencia del consistorio. En su intervención, Sánchez-Mateos explicó que el objetivo del Área es "visibilizar y reflexionar sobre los nuevos fenómenos detrás del consumo, superando la visión tradicional centrada únicamente en el alcohol o el tabaco".

El técnico municipal contextualizó la jornada tras los "preocupantes resultados obtenidos durante la campaña de prevención del VIH realizada en 2025". Según los datos aportados, de las 98 pruebas rápidas realizadas en la localidad hasta noviembre, se detectó un 3% de positivos. "Es un dato enormemente revelador que no podemos ignorar", afirmó Sánchez-Mateos, quien vinculó estas cifras al "abandono progresivo del uso del preservativo" y a la necesidad de mantener estas campañas de forma permanente durante todo el año, y no como acciones puntuales.

Luis Vinuesa González, concejal del Área de Salud y Juventud, ofreció un discurso cercano, destacando su pertenencia a una generación donde "la forma de ligar, relacionarnos y consumir cambia muy rápido". Vinuesa defendió que la política "debe responder a lo que ocurre en las apps de citas, en las fiestas y en los grupos de WhatsApp", abordando temas como el ChemSex "sin tabúes".

"Hablar de ChemSex es hablar de salud y de riesgos reales, no de juzgar la vida privada de nadie", sentenció el edil. Vinuesa agradeció la labor de los profesionales sanitarios y de las asociaciones, subrayando que "la salud no es solo la ausencia de enfermedad, sino también tener información, redes de apoyo y espacios seguros".

Finalmente, Mariano Donate, presidente de la Asociación Amparo LGTBIQ+, detalló la evolución de la estrategia de prevención. Donate explicó cómo el proyecto piloto inicial, basado en la recogida de autotest en farmacias, fracasó debido a la falta de privacidad en un municipio pequeño. Sin embargo, tras reformular la campaña hacia un modelo de cita concertada en espacios seguros o a domicilio, la respuesta fue masiva, llegando a realizarse casi un centenar de pruebas.

Donate presentó el lema de este año, “Quiere, Quiérete”, que pone el foco en el amor propio y el autocuidado. Asimismo, destacó el valor diferencial del servicio que ofrece Amparo LGTBIQ+: el acompañamiento. "Cuando un test da positivo, no dejamos a la persona sola; ofrecemos un asesoramiento integral para que sepan los pasos a seguir, reduciendo el estigma y el miedo", concluyó, recordando que aunque el VIH ya no es una condena de muerte, sigue conllevando una carga social que requiere apoyo profesional.

El punto central del evento llegó con la celebración de una mesa redonda bajo el lema "Uniendo Redes de Adicciones y Salud Sexual". En ella se abordó el fenómeno del ChemSex desde una perspectiva multidisciplinar, contando con las intervenciones de Eugenio Alcaide Merlo, licenciado en Pedagogía y educador de calle del programa EMPUG (atención a personas con drogodependencia); Yolanda Pérez Sánchez, trabajadora social y directora del Programa de Educación de Calle con personas con drogodependencia; Alejandro Alder Izquierdo, psicólogo general sanitario y coordinador del SAI LGTBI de Castilla-La Mancha y Hugo Daniel Patiño Ortega, médico internista del Hospital Universitario Mancha Centro y presidente de la Comisión de Enfermedades Infecciosas de la Gerencia Integrada de Alcázar de San Juan.

Durante el debate, los ponentes analizaron los riesgos asociados a esta práctica, las estrategias de reducción de daños y la importancia de la coordinación entre los servicios sanitarios, sociales y las asociaciones para ofrecer una respuesta eficaz.

La jornada concluyó con un turno de preguntas y reflexiones, consolidando el compromiso de Miguelturra con la salud pública y la prevención de adicciones.