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Alumnos de la Escuela Técnica Superior de Caminos de Ciudad Real han "tirado" de conocimientos y de ingenio para elaborar unos proyectos de fin de carrera en el que se plantean soluciones a la desconexión actual que existe entre Ciudad Real y Miguelturra.

Ideas para sortear un "abismo" de un puñado de metros.

Los apenas cuatro kilómetros que separan el centro de Ciudad Real del centro de Miguelturra se convierten en un "abismo" en lo que se refiere al tránsito de peatones y de ciclistas que desean optar por dejar de lado el coche para sortear el "puñado" de metros que separan una localidad de otra.

Para evitar ciudadrealeños y miguelturreños se enfrenten al "precipicio" que marca la autovía, tres alumnos de la Escuela Técnica Superior de Caminos han "tirado" de conocimientos y de ingenio para elaborar unos proyectos de fin de carrera en el que se plantean soluciones a la desconexión actual que existe entre ambos municipios.

Así, la ciudadrealeña Pilar Gómez ha diseñado una pasarela atirantada entre el espacio comprendido entre Ciudad Real y Miguelturra, sobre la A-43, con el fin de dar una respuesta eficaz a las reivindicaciones que han planteado los colectivos de ciclistas, dijo, tras explicar que era conocedora de la demanda por parte de éstos de un enlace que acercara ambos municipios a través de las dos ruedas o del acceso peatonal.

El coste de dicha pasarela sería de 1,5 millones de euros, si bien matizó que en razón de la alternativa de pasarela que se plantee, su importe se podría reducir considerablemente. "Hay algunas más simples que apuestan por tipologías menos atrevidas y que pueden tener unos costes inferiores e incluso reducir el presupuesto a la mitad", afirmó.

Su compañera Amparo Moyano ha ido en la línea de las alternativas que se están desarrollando con éxito en otros puntos como Barcelona y ha proyectado la construcción de un ecobarrio muy cercano a la zona de la autovía y de la línea de ferrocarril. En esa área "dibuja" un barrio sostenible en el que primaría un tipo de movilidad pensada para el peatón y el ciclista, así como unos edificios con medidas de aislamiento que permitieran una mayor adaptación climatológica.

Además, el proyecto incluye la ordenación de un sector que queda comprendido entre la A-43 y la línea de tren y que iría también acorde a la pasarela de conexión que propone Gómez.



Fuente Manuela Lillo - jueves, 24 de enero de 2013. La Tribuna de Ciudad Real.