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La Cofradía de María Santísima del Gran Dolor celebra "50 años de historia"

La Cofradía de María Santísima del Gran Dolor celebraba el pasado sábado, día 19 de octubre, el acto denominado '50 Años de historia', con motivo de la conmemoración del 50 aniversario de su fundación. Un evento que se celebró en el Teatro-Cine Paz y que contó con el respaldo del alcalde de Miguelturra, Luis Ramón Mohíno, la concejal de Cultura, Carmen Mª Mohíno, la Corporación Municipal, la Parroquia, representada por el Consiliario D. Jaime Quiralte, y las hermandades y cofradías de la localidad, encabezadas por su presidente, Antonio Arenas.

Organizado por la 'Comisión del cincuentenario' de la Cofradía, el acto sirvió para rendir homenaje a todas aquellas personas que, de un modo u otro, han desempeñado cargos en la Cofradía a lo largo de este medio siglo de vida. Así, se reconoció la labor de todos los hermanos y hermanas mayores, personas que han desempeñado cargo con responsabilidad dentro de la Junta de Gobierno, o a la cuadrilla de costaleras que portó por primera vez a hombros a la Titular, María Santísima del Gran Dolor. También hubo un homenaje a título póstumo a dos hermanos que desarrollaron una importante labor dentro de la Cofradía.

El alcalde de Miguelturra, Luis Ramón Mohíno, reconoció "la especial ilusión" que le hacía participar en este acto "porque he vivido toda mi infancia, y parte de mi adolescencia, al calor del incansable trabajo que suponía celebrar estación de penitencia en cada Jueves Santo en Miguelturra" en referencia a lo que resumió como "la implicación directa que mi familia ha tenido en esta hermandad durante años y por la que he tenido yo mismo, gracias a lo que he podido disfrutar de grandes momentos".

El regidor destacó que en estos 50 años de vida "se han superado un gran número de dificultades, pero son también numerosos los logros que hay que reconocer en esta fecunda labor realizada por todos los hermanos en su misión evangelizadora en las calles y en las casas de Miguelturra".  

Mohíno, que con una evidente implicación personal realizó un recorrido por su experiencias dentro de la Cofradía, recordó "aquellas semanas de preparación en Cuaresma en las que un grupo de aficionados nos reuníamos en una cochera para aprender sones y que pudiésemos sacar nuestras cornetas en Semana Santa", sin olvidarse de "esa marea de capas azules recorriendo las calles de Miguelturra". El edil también tuvo unas palabras especiales para la primera cuadrilla de costaleras que sacó a hombros a María Santísima del Gran Dolor, "todo un hito en la historia local gracias a un grupo de mujeres valientes que rompían muchos estereotipos y que sin saberlo estaban haciendo historia" dijo el alcalde.

Luis Ramón Mohíno también agradeció a todas las personas que han formado parte de la Cofradía en sus distintas etapas, "por el legado que dejan hoy tras una mitad de siglo recorrida; 50 años de grandes decisiones que hacen que hoy disfrutemos de nuestra hermandad en total plenitud".

Finalmente, el alcalde invitó a todos los miguelturreños y miguelturreñas "a vivir este 50 aniversario de una manera más intensa, unidos bajo un sentimiento común, nuestra Virgen del Gran Dolor" y añadió que esta conmemoración "debe servirnos para dar gracias por todo el bien que nos ha hecho esta querida hermandad, al tiempo que sirva de merecido reconocimiento a toda esta labor que ha sido llevada a cabo en su seno por todos y cada uno de los hermanos y devotos de sus Sagrados Titulares, que en algún momento de su historia ofrecieron su tiempo y lo mejor de sí mismos para hacerla más grande" finalizó el regidor.

Por su parte, en representación de la Parroquia Nuestra Señora de la Asunción, el consiliario D. Jaime Quiralte, hizo mención a dos palabras griegas: Cronos y Kairós, en referencia a dos diferentes maneras mitológicas de medir el tiempo. Quiralte aseguró que "Cronos era un dios devastador, con el que el paso del tiempo, como mucho, puede quedarnos en la memoria de manera melancólica". En cuanto a Kairós, el consiliario destacó que "se considera como un paso del tiempo que genera oportunidad, por lo que hace referencia a un tiempo de gracia". En este sentido, D. Jaime Quiralte resumió que como cristianos "este aniversario debe servir para poner las cuentas a cero, recordar estos años como una oportunidad y así vivir con mucho entusiasmo todo lo que el Señor nos quiere dar" y añadió que "por eso es buena noticia que se puede vivir el tiempo, estos 50 años, no sólo como memoria pasada, sino como oportunidad para el futuro".

Finalmente, el consiliario invitó a todo el mundo "a vivir este jubileo sabiendo que la Virgen es madre de liberación" y animó a los asistentes "a poner toda vuestra vida y todo aquello que os pese a Su disposición, porque Ella es una gran liberadora".

Tras estas palabras, se procedió al desarrollo de los homenajes. En primer lugar se nombró a todas las costaleras que formaron la primera cuadrilla de la Virgen del Gran Dolor. Todas las asistentes recibieron un diploma conmemorativo del 50 aniversario. Víctor Manuel Sánchez, que fue capataz, hermano mayor y ha sido elegido como coordinador del cincuentenario, tuvo unas palabras de agradecimiento a todas ellas.

Seguidamente, se rindió homenaje a todas las personas que, a lo largo de estos 50 años, han desempeñado algún cargo de responsabilidad en la Cofradía. Así, los presentes recibieron una cerámica conmemorativa del aniversario.

Otro de los homenajes que se llevaron a cabo fue un reconocimiento a todos los hermanos y hermanas mayores que han defendido el cargo de mayor responsabilidad dentro de la Cofradía. Todos ellos fueron obsequiados con una placa.

Finalmente, la comisión organizadora del cincuentenario quiso rendir homenaje a dos hermanos fallecidos que han sido fundamentales en la historia de esta Cofradía. Los hijos de Francisco Trujillo Castellanos y Ascensión López Rivas fueron los encargados de recibir el sentido homenaje con el recuerdo de todos los presentes. Fernando Espinosa, que ha ostentado el cargo de hermano mayor de 2022 a 2024, fue el encargado de realizar estas menciones.

Espinosa, destacó que Francisco Trujillo Castellanos, que fue el primer capataz del paso de misterio de Nuestro Padre Jesús en Su Flagelación, "fue una persona que marcó un antes y un después en la Semana Santa de nuestro pueblo". Por su parte, Ascensión López Rivas, una persona que nos dejó hace poco, "formó parte de la cofradía casi los 50 años de historia, perteneciendo a diferentes juntas de gobierno con varios cargos de responsabilidad, además de organizar el cortejo de Jueves Santo".

Fernando Espinosa aprovechó para recordar que "este aniversario tiene como objetivo unir lo máximo posible a todas las personas que han tenido un arraigo con nuestra cofradía. Esas personas que sienten ese pellizco cuando le hablas de Gran Dolor y para las que ha sido muy especial formar parte de esta devoción". En su discurso, Espinosa no quiso olvidarse de "aquellos años en los que nuestra Cofradía llegó a alcanzar la suma de casi 100 costaleros y costaleras; los años con cuatro pasos bajando por las escaleras del Cristo; o los cientos de Nazarenos con sus capas azules que llegaron a procesionar durante los primeros años de andadura", tras lo que afirmó que "el sentimiento que tenemos por esta Cofradía nos hace luchar por ella".

En cuanto a los actos programados para el 50 aniversario, Fernando Espinosa aseguró que "han sido muchos meses de duro trabajo, organizando un programa acorde a lo que merecen nuestros hermanos y hermanas" por lo que agradeció a todas las personas y hermandades que han colaborado en la organización de estos días de conmemoración.

El acto estuvo amenizado por el cuarteto de saxofones de la Banda Sinfónica de Música de Miguelturra, que interpretó marchas como 'Macarena', 'La Madrugá', 'Hosanna in Excelsis', 'Pasa la Macarena' o 'Encarnación Coronada', que fue coreada al finalizar el acto por el público asistente.

Los actos conmemorativos del 50 aniversario continuarán con la catequesis para niños y adultos, del 21 al 25 de octubre en la ermita del Santísimo Cristo de la Misericordia. El 25 de octubre, tendrá lugar la meditación de los siete Dolores de la Virgen María, también en la ermita del Cristo.

El sábado, 26 de octubre, habrá rezo del Santo Rosario y Santa Misa en honor a los Sagrados Titulares, en la ermita del Cristo.

El domingo, 27 de octubre, se celebrará la salida extraordinaria de María Santísima del Gran Dolor, que será a las 17:30 horas.

Los actos del 50 aniversario finalizarán con una misa por los hermanos difuntos el domingo, 3 de noviembre.