Plaza de España, 1

  926 241 111

  9:00 a 14:00 horas. Lunes a viernes

Por cada 1.000 habitantes, se ha recogido una media de 3,23 kilos al mes, frente a los 2,72 kilos del año anterior.

SIGRE proporcionó un correcto tratamiento medioambiental de los medicamentos recogidos en Castilla La Mancha en 2005.

SIGRE proporcionó en 2005 un correcto tratamiento medioambiental a un total de 73.486 kilos de envases de medicamentos recogidos en Castilla-La Mancha, lo que supone un incremento del 21,78 por ciento con respecto al año anterior en el que se gestionaron 60.341 kilos. SIGRE es una entidad sin ánimo de lucro creada por la industria farmacéutica con el apoyo de la distribución y de las farmacias para ofrecer a todos los ciudadanos un sistema, cómodo y seguro, para desprenderse de los envases y restos de medicamentos que ya no necesitan.

De estos 73.486 kilos recogidos en Castilla-La Mancha, 20.221 kilos corresponde a la provincia de Ciudad Real, que fueron depositados por los ciudadanos ciudadrealeños en los 283 Puntos SIGRE de esta provincia.

Este aumento del 21,78 por ciento en las cantidades recogidas y gestionadas por SIGRE, sitúa a Castilla-La Mancha por encima del crecimiento medio nacional que ha sido del 20,1 por ciento.

Este volumen de envases de medicamentos fue depositado por los castellano-manchegos en el contenedor blanco de los Puntos SIGRE existentes en las 1.113 farmacias de toda la Comunidad Autónoma.

A nivel nacional, en 2005, SIGRE recogió y gestionó un total de 1.990 toneladas, lo que representa un incremento del 20,1 por ciento respecto de las 1.656,3 toneladas de envases de medicamentos que los ciudadanos depositaron en los Puntos SIGRE de las farmacias españolas en 2004.

Por lo que respecta al ratio de kilogramos recogidos por cada 1.000 habitantes al mes en Castilla-La Mancha, éste se situó en 2005 en 3,23 kilos, frente a los 2,72 kilos del año anterior.

Por oficina de farmacia en esta Comunidad se recogieron mensualmente 5,50 kilos en 2005, frente a los 4,53 kilos de 2004, lo que supone un aumento del 21,41 por ciento.

En opinión del director general de SIGRE, Juan Carlos Mampaso, "estos datos reflejan la consolidación de SIGRE como iniciativa impulsada por la industria farmacéutica, con el apoyo y colaboración de toda la distribución farmacéutica y las oficinas de farmacia, para la recogida selectiva de los envases y los restos de medicamentos, lo que está haciendo posible que el ciudadano incorpore a sus hábitos el uso del contenedor blanco del Punto SIGRE, depositando en él los envases y restos de medicamentos que tienen en sus hogares".

"Asimismo –continúa diciendo--, es una muestra del calado social que esta iniciativa medioambiental y sanitaria está teniendo entre los ciudadanos, cada vez más concienciados de que con este pequeño gesto están contribuyendo no sólo a cuidar la salud de la naturaleza, sino también su propia salud. Así, retirando del hogar los restos de medicamentos procedentes de tratamientos ya finalizados y aquellos que estén caducados, para depositarlos en el Punto SIGRE de su farmacia, se están evitando los accidentes que se puedan producir por el consumo de medicamentos en mal estado o por una automedicación incontrolada"


Una mayor concienciación social

Los resultados de la actividad de SIGRE a lo largo del año 2005 reflejan la creciente y cada vez mayor sensibilidad medioambiental del ciudadano respecto a la recogida selectiva de los envases de medicamentos y el cada vez más frecuente uso que hacen de los Puntos SIGRE.

Esta percepción queda avalada por el reciente sondeo de opinión que SIGRE ha llevado a cabo a nivel nacional con el objetivo de medir el grado de percepción y aceptación del Sistema por parte de los ciudadanos. Asimismo, el sondeo ha servido para comprobar que los mensajes medioambientales y socio-sanitarios que se lanzan desde SIGRE son bien percibidos y motivan a los ciudadanos a colaborar activamente con esta iniciativa medioambiental impulsada por la industria farmacéutica con el apoyo de la distribución farmacéutica y las farmacias.

Así, 6 de cada 10 encuestados afirman haber utilizado el contenedor blanco del Punto SIGRE en el último año, cuya existencia es conocida por un porcentaje muy alto de ciudadanos (82 por ciento).

La recomendación de revisar periódicamente el botiquín doméstico forma parte de los mensajes básicos de las campañas de concienciación social de SIGRE. Este mensaje ha empezado a calar en los ciudadanos: 9 de cada 10 ha adoptado el hábito de revisar su botiquín doméstico al menos una vez al año, retirando principalmente de éste los medicamentos caducados (57 por ciento) y los que ya no usa (26 por ciento).

Desde la puesta en marcha de SIGRE en el año 2001, se ha registrado una evolución muy positiva en el hábito ciudadano de desprenderse correctamente de los medicamentos: el porcentaje de ciudadanos que desechan los restos de medicamentos de forma incorrecta, tirándolos por la basura o por el desagüe, ha experimentado un descenso importante, pasando del 43 por ciento en 2003 al 8 por ciento en 2006.

Esta sensibilización medioambiental en relación con el medicamento se complementa con una cada vez mayor concienciación sanitaria. De acuerdo con los resultados del sondeo de opinión efectuado por SIGRE, 7 de cada 10 encuestados considera que automedicarse con restos de medicamentos procedentes de tratamientos ya finalizados puede ser perjudicial para su salud.

Aunque el número de objetos indebidamente depositados en los Puntos SIGRE, suponen una cantidad mínima, conviene recordar lo que los ciudadanos deben y no deben llevar al Punto SIGRE de su farmacia:

QUÉ LLEVAR AL PUNTO SIGRE DE LA FARMACIA

Al acabar un medicamento: el envase vacío
Al finalizar un tratamiento: los envases vacíos o con restos de medicación
Al revisar el botiquín: los medicamentos que no se necesiten y los caducados
y todos con su caja y prospecto

NO DEPOSITAR EN EL PUNTO SIGRE DE LA FARMACIA

Gasas y/o apósitos
Agujas y objetos cortantes
Termómetros, pilas, radiografías…
Por la Salud de la Naturaleza

Los envases recogidos de los Puntos SIGRE, instalados en las farmacias de toda España, son trasladados a la Planta de Selección y Clasificación, diseñada y construida exclusivamente para la actividad medioambiental de SIGRE, que está ubicada en la localidad coruñesa de Cerceda.

En esta Planta, única en su género, se lleva a cabo una labor pionera en toda Europa que consiste en separar los envases de los restos de medicamentos que éstos puedan contener, con el fin de proceder, por un lado, al reciclado de los materiales de los envases –papel, cartón, plástico, vidrio, metales, etc.—y, por otro lado, a la eliminación controlada, mediante valorización energética, de los restos de medicamentos y de aquellos envases impregnados de restos de medicamentos que no han podido ser reciclados.

Una vez realizada la labor de separación y clasificación en la Planta, se ha podido reciclar el 30,62% del material de los envases recuperados en 2005 en los Puntos SIGRE, cifra superior a la alcanzada en el ejercicio anterior. En Castilla-La Mancha, este porcentaje se situó en el 33,86%.

En el caso del papel y el cartón, hay que reseñar que su recuperación y reciclado ha evitado la tala de más de 6.200 árboles, lo que equivale a una superficie de arboleda de más de 50 kilómetros de calles en una ciudad, un dato muy ilustrativo de los beneficios que la actividad de SIGRE reporta a la sociedad, a través de la colaboración activa de los ciudadanos.

Por otra parte, los envases que no se pueden separar del medicamento (pomadas, jarabes, ampollas, etc.) y los restos de fármacos, se han destinado a valorización para la producción de energía, lo que desde un punto de vista medioambiental también contribuye a evitar la utilización de otros combustibles sólidos como carbón o petróleo.

Con la valorización energética de estos envases y restos de medicamentos se ha generado la suficiente energía como para iluminar 50 colegios de 500 alumnos cada uno, durante un año.

Fuente información: Porter Novelli.