Román Rivero "Treinta años es un buen ciclo para cambiar a una población"
Cumplidos 30 años de las primeras elecciones democráticas en España, el Ayuntamiento de Miguelturra, a través de su radio municipal, Radio Miguelturra, ha querido hacer balance con los tres políticos más veteranos de cuantos han pasado por el Consistorio miguelturreño en todo este tiempo. Es el caso del alcalde, Román Rivero, el actual concejal de Obras Públicas Municipales y Urbanismo, Jesús Sánchez, y el actual concejal de Educación y Comunicación, Joaquín González.
Y es que el regidor del municipio, Román Rivero, entró como alcalde a los 27 años en los primeros comicios democráticos del país, convirtiéndose, de esta manera, en uno de los pocos alcaldes de España que, con su edad, aún preside un Ayuntamiento de una población del tamaño de Miguelturra. Hay que recordar que en España, de los más 8.000 municipios existentes, sólo hay 68 alcaldes que permanezcan en el gobierno desde 1979, es decir, 30 años en la municipalidad democrática. Además, de éstos, exceptuando el de Getafe, la mayoría son pueblos muy pequeños con un centenar de habitantes.
Joaquín González, también formaba parte de aquel primer grupo de personas que constituyeron el Partido Socialista en Miguelturra y, aunque acompañó Román Rivero en las primeras listas como suplente, no fue hasta las terceras elecciones cuando entró a formar parte de la Corporación municipal.
El alcalde de Miguelturra relató que, en aquella época, no había agua no sólo en el municipio, tampoco en el pantano de Gasset. El Ayuntamiento empezó en una casa de alquiler en la calle Príncipes de España. Una casa particular, un saloncito de oficinas, un despacho para el secretario y otro para el alcalde componían las dependencias municipales, donde se celebraban los plenos juntando mesas y cogiendo las sillas de los administrativos. Una situación que duró hasta 1985, cuando entra en vigor la Ley de Régimen Local y momento en que se estrena el nuevo Ayuntamiento.
Rivero explicó que, con 27 años se tienen muchas ganas de mejorar las cosas en un pueblo, Miguelturra, que era el último de la provincia en cuanto a servicios y el primero en cuanto a carencias. Como anécdota, el regidor describió cómo, cuando tomaba un taxi desde Ciudad Real, "éste no te llevaba a tu casa sino que te dejaba en la plaza, que era lo que estaba pavimentado y tú tenías que marchar con tu maleta andando hasta tu casa", pues sólo había seis o siete calles pavimentadas.
Para Román Rivero, los primeros seis años fueron los más duros porque "no había medios ni gente con la que trabajar, las calles se pavimentaban pidiéndole dinero a los vecinos que eran quienes lo pagaban". Durante 15 años, entre planes de empleo y la aportación de los vecinos se pavimentó el 90 por ciento de las calles de Miguelturra, justo antes de que comenzara el verdadero crecimiento.
Jesús Sánchez entró en la mitad de la segunda legislatura cuando una compañera se fue, y lo que más recuerda es la implicación a la que se somete un concejal en aquellas condiciones. "Cuanto entras en el Ayuntamiento cada vez te implicas más -explica-y vas aprendiendo poco a poco". Según dice, "pasa una legislatura y ves que no has terminado tu proyecto, y pasa otra y siempre surgen ideas nuevas que quieres acabar y es la ilusión de ir renovando, cambiando…". El actual concejal de Obras hizo un repaso de algunos proyectos llevados a cabo, "proyectos que nada tienen que ver con los actuales -afirma- porque se trataba de implantar lo más básico en Miguelturra". "Se trataba de llevar luz y agua a las viviendas, no como ahora que, afortunadamente, trabajamos para hacer, por ejemplo, locales de ensayo y pistas polideportivas", recuerda. En la primera legislatura, Jesús Sánchez se hizo cargo del área de Agua y Alumbrado para pasar, en los siguientes cuatro años, a dirigir la Concejalía de Obras y Urbanismo.
Joaquín González recuerda cómo en aquellos años era mayor el número de jóvenes concienciados en cambiar las cosas. "Queríamos luchar por un cambio radical y democrático en Miguelturra". Por eso, en el año 87 fue incluido en las listas llevando la cartera de Educación, un gran reto ya que cuando llegó sólo había dos colegios y la situación era, como en todo lo demás, bastante precaria. González explicó que en aquellos años incluso los cristales del colegio los arreglaban los maestros. "Hoy podemos decir que la localidad cuenta con unos colegios que son de los mejores dotados de la provincia, Región e incluso en España", asegura. Hoy Miguelturra posee cuatro colegios públicos, uno concertado, un instituto, una guardería y un comedor escolar.
Pero en este recorrido Joaquín González también ha estado al frente de Bienestar Social, de Juventud o de Deportes, áreas en las que también se han conseguido logros significativos tales como comenzar con la primera oficina de Información Juvenil o el importante logro del actual Centro de Día, además de un notable incremento de los servicios sociales. En la actualidad, González es también concejal de Comunicación, desde donde gestiona la radio local y el Boletín de Información Municipal.
Pero tras 30 años de gobierno, es momento de rememorar la Historia. Y es en este punto donde el alcalde miguelturreño, Román Rivero recuerda que, aunque sin experiencia, comenzaron su andadura política con mucha ilusión y con la firme convicción de que no habría vuelta atrás. "Quizá en lo ocurrido el 23-F" reconoce Rivero. Antes de las elecciones –continúa- veníamos trabajando desde 1975 con "nuestra oposición especial", lanzando octavillas, hablando con la gente, acudiendo a reuniones del Gobierno Civil que ya era, por aquellos entonces, de la UCD, para exponer la problemática de Miguelturra y pidiendo un cambio de gobernación. "Fue en 1978 cuando constituimos el Partido Socialista en Miguelturra, al poco tiempo constituimos una lista para poder presentarnos y hasta hoy…", concluye.
Logros
Los dos ediles y el regidor están de acuerdo con que el cambio ha sido espectacular y aunque, apunta Román Rivero, habría que preguntar a los vecinos, podemos decir que lo conseguido, a nivel personal, ha sido muy satisfactorio: "Han sido muchas horas y esfuerzos los que hemos dedicado; si miramos estos 30 años -señala Rivero- podemos decir que este trabajo nos ha absorbido totalmente". Para el alcalde, este trabajo debe implicar una satisfacción personal, de lo contrario, es imposible llevarlo a cabo.
Pros y contras
El mayor inconveniente que Román Rivero y su equipo han encontrado a lo largo de todos estos años ha sido la falta, a veces, de comprensión o apoyo en las instituciones. Según relata el propio regidor miguelturreño, "lo lamentable de la política municipal es que hay que estar mendigando las ayudas, la financiación… no tenemos la financiación suficiente para acometer, con nuestros propios medios, las inversiones que entendemos son prioritarias para Miguelturra y, aunque nosotros lo entendamos así, tenemos que convencer a las demás instituciones de que son necesarias.
En este sentido, Joaquín González ha querido dejar claro que el gran hándicap de un Ayuntamiento es que, de cada 100 euros de impuestos que paga un ciudadano, sólo unos 12 ó 13 van a parar a las arcas municipales para que sean gestionados directamente por el Consistorio, el resto lo administra el Estado y las Comunidades Autónomas. Sin embargo, es a la Administración municipal al primer lugar donde acude un ciudadano para que se le solucionen sus problemas.
Por el contrario, hay muchos aspectos positivos. Para Rivero, la convivencia política y la democracia han servido para suavizar posturas históricamente irreconciliables. Había posturas muy radicalizadas entre la extrema derecha y la izquierda porque no había convivencia, sino la imposición de una postura sobre la otra. Sin embargo, el hecho de que haya sido la izquierda quien haya llevado a cabo la transformación de Miguelturra ha potenciado ese espíritu de convivencia".
"Tuvimos buena relación tanto con el Partido Comunista como con Falange Española y todos los signos políticos aportaron su granito de arena. Recuerdo que, cuando empezamos, nos repartíamos las tareas entre todos, daba igual de qué partido fueran, porque cada uno llevaba su área y tenía su responsabilidad, y ha sido así hasta hace relativamente poco tiempo, hasta que la oposición se negó a aceptar delegaciones en 1995. Hasta entonces, cada concejal de la oposición tenía su parcela y era curioso porque, por un lado gobernaba pero por otro criticaba y era un poco una locura, pero funcionó."
Además hay que dar las gracias a los trabajadores de los que nos hemos rodeado. De los 16 trabajadores que éramos al principio a los más de 250 que hay ahora… a todos aquellos que han influido en el cambio y han podido llevar a cabo los objetivos. Del mismo, modo, hay que recordar a aquellos trabajadores que nos encontramos al entrar, la mayoría del antiguo régimen y los que entramos no sólo éramos nuevos, además de izquierdas. Sin embargo, guardamos recuerdos muy entrañables y tengo la sensación de que ellos mismos tenían ilusión en que llegara alguien con empuje.
Miguelturra dentro de 30 años
Con respecto al futuro, los políticos más veteranos de Miguelturra diferencian entre el futuro más inmediato, para el que tratarán de cumplir los compromisos de construcción de un nuevo colegio, un nuevo instituto o un comedor escolar. Además de los ambiciosos proyectos previstos en materia de urbanismo, como es el caso del polígono industrial "Estación Zodejo".
Por su parte, Román Rivero apunta que el futuro, a día de hoy, pasa por ejercer una política austera, de control del gasto público, donde saber priorizar es uno de los aspectos más importantes para salir de una crisis. "Por eso y a pesar de la peculiar crisis que tenemos en Miguelturra -añade el regidor- van a ser los años en que más se invierta, vamos a tener un "Miguelturra en obras" y, aunque sabemos que los vecinos tendrán que tener paciencia, el futuro traerá servicios que el ciudadano agradecerá.
Para Joaquín González, es importante que, dentro de treinta años, los vecinos vivan en un "Miguelturra sostenible". Antes se trabajaba por eliminar las carencias más básicas, como esperar al médico en la puerta de su casa. Ahora, sin embargo, se parte de un nivel alto de bienestar, por lo que hay seguir progresando, eso sí, en otros aspectos y en otros ámbitos, pero de una manera sostenible. "Ese el Miguelturra que me gustaría que disfrutaran mis hijos". Desde su Concejalía de Urbanismo, Jesús Sánchez querría que Miguelturra siguiera creciendo por la senda del progreso, como actualmente, aunque respetando el deseo de Román Rivero de que ninguna construcción futura superase en altura a la "Torre Gorda".
Román Rivero, por su parte, aspira a ver un Miguelturra con una calidad de vida superior, si cabe, a la actual. Según afirma, le gustaría que los vecinos utilizaran un transporte limpio para desplazarse como la bicicleta y ya están sentando las bases para ello. Al mismo tiempo, la localidad está siendo pionera en la adaptación tecnológica de la Administración para con sus ciudadanos. Redes de fibra óptica, Administración Digital… en definitiva, facilitar la comunicación y el acercamiento entre los ciudadanos y los gestores municipales del futuro.
Y es que el regidor del municipio, Román Rivero, entró como alcalde a los 27 años en los primeros comicios democráticos del país, convirtiéndose, de esta manera, en uno de los pocos alcaldes de España que, con su edad, aún preside un Ayuntamiento de una población del tamaño de Miguelturra. Hay que recordar que en España, de los más 8.000 municipios existentes, sólo hay 68 alcaldes que permanezcan en el gobierno desde 1979, es decir, 30 años en la municipalidad democrática. Además, de éstos, exceptuando el de Getafe, la mayoría son pueblos muy pequeños con un centenar de habitantes.
Joaquín González, también formaba parte de aquel primer grupo de personas que constituyeron el Partido Socialista en Miguelturra y, aunque acompañó Román Rivero en las primeras listas como suplente, no fue hasta las terceras elecciones cuando entró a formar parte de la Corporación municipal.
El alcalde de Miguelturra relató que, en aquella época, no había agua no sólo en el municipio, tampoco en el pantano de Gasset. El Ayuntamiento empezó en una casa de alquiler en la calle Príncipes de España. Una casa particular, un saloncito de oficinas, un despacho para el secretario y otro para el alcalde componían las dependencias municipales, donde se celebraban los plenos juntando mesas y cogiendo las sillas de los administrativos. Una situación que duró hasta 1985, cuando entra en vigor la Ley de Régimen Local y momento en que se estrena el nuevo Ayuntamiento.
Rivero explicó que, con 27 años se tienen muchas ganas de mejorar las cosas en un pueblo, Miguelturra, que era el último de la provincia en cuanto a servicios y el primero en cuanto a carencias. Como anécdota, el regidor describió cómo, cuando tomaba un taxi desde Ciudad Real, "éste no te llevaba a tu casa sino que te dejaba en la plaza, que era lo que estaba pavimentado y tú tenías que marchar con tu maleta andando hasta tu casa", pues sólo había seis o siete calles pavimentadas.
Para Román Rivero, los primeros seis años fueron los más duros porque "no había medios ni gente con la que trabajar, las calles se pavimentaban pidiéndole dinero a los vecinos que eran quienes lo pagaban". Durante 15 años, entre planes de empleo y la aportación de los vecinos se pavimentó el 90 por ciento de las calles de Miguelturra, justo antes de que comenzara el verdadero crecimiento.
Jesús Sánchez entró en la mitad de la segunda legislatura cuando una compañera se fue, y lo que más recuerda es la implicación a la que se somete un concejal en aquellas condiciones. "Cuanto entras en el Ayuntamiento cada vez te implicas más -explica-y vas aprendiendo poco a poco". Según dice, "pasa una legislatura y ves que no has terminado tu proyecto, y pasa otra y siempre surgen ideas nuevas que quieres acabar y es la ilusión de ir renovando, cambiando…". El actual concejal de Obras hizo un repaso de algunos proyectos llevados a cabo, "proyectos que nada tienen que ver con los actuales -afirma- porque se trataba de implantar lo más básico en Miguelturra". "Se trataba de llevar luz y agua a las viviendas, no como ahora que, afortunadamente, trabajamos para hacer, por ejemplo, locales de ensayo y pistas polideportivas", recuerda. En la primera legislatura, Jesús Sánchez se hizo cargo del área de Agua y Alumbrado para pasar, en los siguientes cuatro años, a dirigir la Concejalía de Obras y Urbanismo.
Joaquín González recuerda cómo en aquellos años era mayor el número de jóvenes concienciados en cambiar las cosas. "Queríamos luchar por un cambio radical y democrático en Miguelturra". Por eso, en el año 87 fue incluido en las listas llevando la cartera de Educación, un gran reto ya que cuando llegó sólo había dos colegios y la situación era, como en todo lo demás, bastante precaria. González explicó que en aquellos años incluso los cristales del colegio los arreglaban los maestros. "Hoy podemos decir que la localidad cuenta con unos colegios que son de los mejores dotados de la provincia, Región e incluso en España", asegura. Hoy Miguelturra posee cuatro colegios públicos, uno concertado, un instituto, una guardería y un comedor escolar.
Pero en este recorrido Joaquín González también ha estado al frente de Bienestar Social, de Juventud o de Deportes, áreas en las que también se han conseguido logros significativos tales como comenzar con la primera oficina de Información Juvenil o el importante logro del actual Centro de Día, además de un notable incremento de los servicios sociales. En la actualidad, González es también concejal de Comunicación, desde donde gestiona la radio local y el Boletín de Información Municipal.
Pero tras 30 años de gobierno, es momento de rememorar la Historia. Y es en este punto donde el alcalde miguelturreño, Román Rivero recuerda que, aunque sin experiencia, comenzaron su andadura política con mucha ilusión y con la firme convicción de que no habría vuelta atrás. "Quizá en lo ocurrido el 23-F" reconoce Rivero. Antes de las elecciones –continúa- veníamos trabajando desde 1975 con "nuestra oposición especial", lanzando octavillas, hablando con la gente, acudiendo a reuniones del Gobierno Civil que ya era, por aquellos entonces, de la UCD, para exponer la problemática de Miguelturra y pidiendo un cambio de gobernación. "Fue en 1978 cuando constituimos el Partido Socialista en Miguelturra, al poco tiempo constituimos una lista para poder presentarnos y hasta hoy…", concluye.
Logros
Los dos ediles y el regidor están de acuerdo con que el cambio ha sido espectacular y aunque, apunta Román Rivero, habría que preguntar a los vecinos, podemos decir que lo conseguido, a nivel personal, ha sido muy satisfactorio: "Han sido muchas horas y esfuerzos los que hemos dedicado; si miramos estos 30 años -señala Rivero- podemos decir que este trabajo nos ha absorbido totalmente". Para el alcalde, este trabajo debe implicar una satisfacción personal, de lo contrario, es imposible llevarlo a cabo.
Pros y contras
El mayor inconveniente que Román Rivero y su equipo han encontrado a lo largo de todos estos años ha sido la falta, a veces, de comprensión o apoyo en las instituciones. Según relata el propio regidor miguelturreño, "lo lamentable de la política municipal es que hay que estar mendigando las ayudas, la financiación… no tenemos la financiación suficiente para acometer, con nuestros propios medios, las inversiones que entendemos son prioritarias para Miguelturra y, aunque nosotros lo entendamos así, tenemos que convencer a las demás instituciones de que son necesarias.
En este sentido, Joaquín González ha querido dejar claro que el gran hándicap de un Ayuntamiento es que, de cada 100 euros de impuestos que paga un ciudadano, sólo unos 12 ó 13 van a parar a las arcas municipales para que sean gestionados directamente por el Consistorio, el resto lo administra el Estado y las Comunidades Autónomas. Sin embargo, es a la Administración municipal al primer lugar donde acude un ciudadano para que se le solucionen sus problemas.
Por el contrario, hay muchos aspectos positivos. Para Rivero, la convivencia política y la democracia han servido para suavizar posturas históricamente irreconciliables. Había posturas muy radicalizadas entre la extrema derecha y la izquierda porque no había convivencia, sino la imposición de una postura sobre la otra. Sin embargo, el hecho de que haya sido la izquierda quien haya llevado a cabo la transformación de Miguelturra ha potenciado ese espíritu de convivencia".
"Tuvimos buena relación tanto con el Partido Comunista como con Falange Española y todos los signos políticos aportaron su granito de arena. Recuerdo que, cuando empezamos, nos repartíamos las tareas entre todos, daba igual de qué partido fueran, porque cada uno llevaba su área y tenía su responsabilidad, y ha sido así hasta hace relativamente poco tiempo, hasta que la oposición se negó a aceptar delegaciones en 1995. Hasta entonces, cada concejal de la oposición tenía su parcela y era curioso porque, por un lado gobernaba pero por otro criticaba y era un poco una locura, pero funcionó."
Además hay que dar las gracias a los trabajadores de los que nos hemos rodeado. De los 16 trabajadores que éramos al principio a los más de 250 que hay ahora… a todos aquellos que han influido en el cambio y han podido llevar a cabo los objetivos. Del mismo, modo, hay que recordar a aquellos trabajadores que nos encontramos al entrar, la mayoría del antiguo régimen y los que entramos no sólo éramos nuevos, además de izquierdas. Sin embargo, guardamos recuerdos muy entrañables y tengo la sensación de que ellos mismos tenían ilusión en que llegara alguien con empuje.
Miguelturra dentro de 30 años
Con respecto al futuro, los políticos más veteranos de Miguelturra diferencian entre el futuro más inmediato, para el que tratarán de cumplir los compromisos de construcción de un nuevo colegio, un nuevo instituto o un comedor escolar. Además de los ambiciosos proyectos previstos en materia de urbanismo, como es el caso del polígono industrial "Estación Zodejo".
Por su parte, Román Rivero apunta que el futuro, a día de hoy, pasa por ejercer una política austera, de control del gasto público, donde saber priorizar es uno de los aspectos más importantes para salir de una crisis. "Por eso y a pesar de la peculiar crisis que tenemos en Miguelturra -añade el regidor- van a ser los años en que más se invierta, vamos a tener un "Miguelturra en obras" y, aunque sabemos que los vecinos tendrán que tener paciencia, el futuro traerá servicios que el ciudadano agradecerá.
Para Joaquín González, es importante que, dentro de treinta años, los vecinos vivan en un "Miguelturra sostenible". Antes se trabajaba por eliminar las carencias más básicas, como esperar al médico en la puerta de su casa. Ahora, sin embargo, se parte de un nivel alto de bienestar, por lo que hay seguir progresando, eso sí, en otros aspectos y en otros ámbitos, pero de una manera sostenible. "Ese el Miguelturra que me gustaría que disfrutaran mis hijos". Desde su Concejalía de Urbanismo, Jesús Sánchez querría que Miguelturra siguiera creciendo por la senda del progreso, como actualmente, aunque respetando el deseo de Román Rivero de que ninguna construcción futura superase en altura a la "Torre Gorda".
Román Rivero, por su parte, aspira a ver un Miguelturra con una calidad de vida superior, si cabe, a la actual. Según afirma, le gustaría que los vecinos utilizaran un transporte limpio para desplazarse como la bicicleta y ya están sentando las bases para ello. Al mismo tiempo, la localidad está siendo pionera en la adaptación tecnológica de la Administración para con sus ciudadanos. Redes de fibra óptica, Administración Digital… en definitiva, facilitar la comunicación y el acercamiento entre los ciudadanos y los gestores municipales del futuro.