Los miguelturreños, Rocio Casas y Christian Quesada, consiguen terminar la Spartan Race
Los miguelturreños, Rocío Casas, y el hijo de esta, Christian Quesada, consiguieron terminar una de las carreras de obstáculo más duras la "Spartan Race" 2015. Esta prueba nació en las pintorescas colinas de Vermont, EE.UU y fue creada para llevar la emoción de las carreras de obstáculos a los espectadores y atletas por igual. Con 130 eventos en 15 países y 6 continentes Spartan Race está disponible para casi todas las personas en el mundo. La Spartan Race es una verdadera aventura con distancias de curso de 5 km (SPRINT), 13 km (SUPER), y 20 km (BEAST) cada carrera está llena de lodo, agua y obstáculos de la firma diseñados para ayudarle a descubrir el espartano que llevas dentro.
Tal como explica uno de sus entrenadores, Miguel Ángel López, "la modalidad en la que tomaron parte los miguelturreños fue la "Super", de 13,5 Km y más de 30 obstáculos, donde la tierra, el barro e incluso el fuego son las innegociables sombras durante todo el recorrido rompepiernas, cuya dureza tocó la extremidad en Madrid debido al justiciero sol y a los más de treinta grados que se alcanzaron en ese fin de semana en la ciudad capitalina."
"Roció y su hijo Cristian se plantearon la participación con el objetivo de terminar esta prueba, ellos sabían de la dureza de la misma y aún así, decidieron seguir adelante". "Por eso, presentaron un día en el gimnasio planteando que si nosotros les podríamos poner un plan de entrenamiento para conseguir su ilusión, que no era otra que la de terminar los dos juntos" explica López.
Bajo las ordenes de Miguel Ángel López y Juan José Castellanos, y en las instalaciones del Gimnasio Kim Miguelturra se pusieron manos a la obra, "no fue fácil ya que el requerimiento físico era muy exigente pero la fuerte mentalidad y la idea clara con la que Rocio y Christian tomaron en sus entrenos ha sido la clave con la que al final recibíamos la noticia y la foto de los dos dándose ese abrazo en la que sobran las palabras" añade Miguel Ángel.
Contaron con el apoyo de un grupo de amigos, compañeros de trabajo y familia con la que se sintieron muy arropados y desde luego dieron la chispa que hacía falta para conseguirlo.
"Solo nos queda agradecerles la confianza puesta en nuestra profesionalidad e instalaciones" añade Lopez y "desde estas líneas poder ser participes de vuestra ilusión y desde luego, hablando con vosotros de la aventura que ha significado para los dos, es un orgullo poder contar nuestra experiencia juntos. "Habéis demostrado una vez más que `quien la sigue la consigue y que cuanto más cuesta el objetivo mayor es la alegría de conseguirlo".
