Las Jornadas de Animación a la Lectura concluyen con un Cuentacuentos.
Como una semana muy “especial”. Así calificaba la celebración de la nueva edición de las Jornadas de Animación a la Lectura el director de la biblioteca municipal de Miguelturra, Juan Ramón Díaz Pinto. Alrededor de cuatrocientos alumnos de los cinco colegios de la localidad han asistido durante estos días a diferentes actividades de cuentacuentos, teatro e invención de historias a través de juegos con el objetivo común de invitar a los más jóvenes a que se aproximen a los libros. En esta ocasión las Jornadas se han dirigido a los escolares de 2º y 3º de enseñanza primaria.
Las Jornadas, que desde hace más de quince años se vienen celebrando con la organización de la propia Biblioteca municipal y el patrocinio del consistorio local y la consejería de cultura de la Junta de Comunidades, se cerraban en la mañana del viernes con la presencia de Adrián Torrero que protagonizó ante los alumnos del nuevo colegio de Miguelturra una actividad de cuentacuentos. Con el título de “La armadura mágica”, los niños volvieron a convertirse en los protagonistas de la historia de Don Quijote, en un “cuentacuentos interactivo” (como lo define su propio creador). Desde el autor, Miguel de Cervantes, hasta Sancho Panza, Don Quijote, Dulcinea, el ventero, etc, muchos de los personajes de la inmortal obra ocuparon las instalaciones de la Biblioteca Municipal encarnados en los sonrientes alumnos.
Adrián Torrero da protagonismo a los niños desde el primer momento de la actividad, en el que les pregunta si conocen el libro del Quijote. Considera que la historia que les propone no sólo se queda en un rato de diversión, sino que se “intenta que los niños comprendan que en los libros pueden encontrar historias que les pueden divertir tanto o más”. Al concluir la función, Adrián reflexionaba sobre los diferentes tipos de público a los que se dirige señalando que “los niños son los mejores, aunque es cierto que no nos vendría mal que se fomentaran un poco más las actividades de cuentacuentos para mayores, para que recordáramos también el interés que tiene la lectura”.
Valoración muy positiva
Tras la representación de la última de las actividades, el director de la Biblioteca Municipal valoraba de forma muy positiva la actitud de los jóvenes ante las diferentes propuestas a las que han asistido en esta nueva edición de las Jornadas: “Yo estoy muy contento de cómo ha ido la semana y la verdad es que no ha podido ir mejor. Los niños se lo han pasado de miedo”. Díaz Pinto no quería destacar por encima de las otras ninguna de las cinco citas ofrecidas este año, de las que añadía que además de la motivación que suponen para los niños, han aportado “otros aspectos, como el hecho de hacerlos reflexionar también sobre algunos valores importantes como la tolerancia y la solidaridad”.
Para el director de la Biblioteca, el objetivo de las Jornadas, “motivar e incentivar a los niños para que vengan a la biblioteca”, se ha cumplido y espera que, tal como ha sucedido en los años previos, en las semanas siguientes a su celebración “se note un aumento de la afluencia de niños a la biblioteca”.
En la actualidad, el número de socios de préstamo es de 3200, de los que buena parte son niños, que “son los que más tiempo permanecen en las propias instalaciones de la biblioteca”. El director quiso animar a los padres en las valoraciones finales de las Jornadas “para que también se impliquen en la motivación por la lectura de sus hijos y que les inculquen que las bibliotecas son sitios en donde además de leer pueden pasárselo muy bien”.
Las Jornadas, que desde hace más de quince años se vienen celebrando con la organización de la propia Biblioteca municipal y el patrocinio del consistorio local y la consejería de cultura de la Junta de Comunidades, se cerraban en la mañana del viernes con la presencia de Adrián Torrero que protagonizó ante los alumnos del nuevo colegio de Miguelturra una actividad de cuentacuentos. Con el título de “La armadura mágica”, los niños volvieron a convertirse en los protagonistas de la historia de Don Quijote, en un “cuentacuentos interactivo” (como lo define su propio creador). Desde el autor, Miguel de Cervantes, hasta Sancho Panza, Don Quijote, Dulcinea, el ventero, etc, muchos de los personajes de la inmortal obra ocuparon las instalaciones de la Biblioteca Municipal encarnados en los sonrientes alumnos.
Adrián Torrero da protagonismo a los niños desde el primer momento de la actividad, en el que les pregunta si conocen el libro del Quijote. Considera que la historia que les propone no sólo se queda en un rato de diversión, sino que se “intenta que los niños comprendan que en los libros pueden encontrar historias que les pueden divertir tanto o más”. Al concluir la función, Adrián reflexionaba sobre los diferentes tipos de público a los que se dirige señalando que “los niños son los mejores, aunque es cierto que no nos vendría mal que se fomentaran un poco más las actividades de cuentacuentos para mayores, para que recordáramos también el interés que tiene la lectura”.
Valoración muy positiva
Tras la representación de la última de las actividades, el director de la Biblioteca Municipal valoraba de forma muy positiva la actitud de los jóvenes ante las diferentes propuestas a las que han asistido en esta nueva edición de las Jornadas: “Yo estoy muy contento de cómo ha ido la semana y la verdad es que no ha podido ir mejor. Los niños se lo han pasado de miedo”. Díaz Pinto no quería destacar por encima de las otras ninguna de las cinco citas ofrecidas este año, de las que añadía que además de la motivación que suponen para los niños, han aportado “otros aspectos, como el hecho de hacerlos reflexionar también sobre algunos valores importantes como la tolerancia y la solidaridad”.
Para el director de la Biblioteca, el objetivo de las Jornadas, “motivar e incentivar a los niños para que vengan a la biblioteca”, se ha cumplido y espera que, tal como ha sucedido en los años previos, en las semanas siguientes a su celebración “se note un aumento de la afluencia de niños a la biblioteca”.
En la actualidad, el número de socios de préstamo es de 3200, de los que buena parte son niños, que “son los que más tiempo permanecen en las propias instalaciones de la biblioteca”. El director quiso animar a los padres en las valoraciones finales de las Jornadas “para que también se impliquen en la motivación por la lectura de sus hijos y que les inculquen que las bibliotecas son sitios en donde además de leer pueden pasárselo muy bien”.
