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Con un bagaje de más de medio siglo, la empresa miguelturreña Kolasol sigue trabajando por la obtención de materiales con nuevos diseños de ejecución en construcción, así como tratar de incluir materias primas residuales, siempre buscando el avance técnic

La empresa Kolasol, Morteros el Sol, colabora con la Universidad de Castilla La Mancha en diversos proyectos.

MORTEROS EL SOL, empresa de esta localidad, conocida como KOLASOL, con más de medio siglo de antigüedad, ha apostado siempre y sigue haciéndolo por la investigación y la innovación. Como consecuencia de esta actitud responsable y valiente, desde hace unos años, es colaboradora habitual de la Universidad regional (UCLM), más concretamente con el Dpto. de Mineralogía aplicada, estableciendo convenios de colaboración y trabajando codo con codo en proyectos innovadores, cuyo objetivo principal es la obtención de materiales con nuevos diseños de ejecución en construcción, que aporten soluciones eficaces a problemas habituales, así como tratar de incluir materias primas residuales, que hasta ahora se almacenaban en vertederos sin uso alguno, en materiales de uso común o específico, entre otras, siempre buscando el avance técnico-tecnológico y el equilibrio sostenible. Fruto de esta relación se han obtenido diversas conclusiones, de entre las que se podrían destacar:

- La obtención de resultados satisfactorios en la posibilidad de incluir ciertos residuos, como son las “arenas negras/verdes”(estas arenas son usadas en el desmoldeo de piezas de fundición y tras varios ciclos de uso se desechan y acaban acumulándose en vertederos), desarrollando formulaciones de morteros de albañilería tradicional, en los que se incluyen estos materiales de desecho, con propiedades, cuyos resultados permiten definirlos como morteros de calidad para el uso descrito.

- A petición de la UCLM, MORTEROS EL SOL, ha puesto a punto un diseño y ejecución del sistema de acondicionamiento y protección para los integrantes electrónicos en los novedosos pavimentos inteligentes, estos pavimentos están formados por piezas calcáreas en las que en su interior se disponen diversos dispositivos electrónicos como sensores, discos duros, etc. y permiten medidas de magnitudes y otros datos que pueden almacenar y transmitir, para evaluarlos posteriormente de manera fácil y sencilla; estos datos pueden ser por ejemplo: temperatura, humedad, ruido ambiental, número de personas que lo transitan, etc., para que estos pavimentos puedan usarse es necesario que las baldosas alberguen la electrónica en su interior, y la dificultad radica en conseguir un encapsulado que proteja estos dispositivos de la humedad y temperaturas extremas, pero que a su vez pueda disipar la energía calorífica que generan al funcionar, evitando problemas de condensación de agua que pueda deteriorar la electrónica, además existe el problema añadido de que este encapsulado debe tener la menor incidencia posible en las lecturas tomadas, sobre todo los datos relacionados con temperatura, humedad, sonido, etc. por lo que, sin la protección descrita en el interior de las piezas, los pavimentos inteligentes realizados de esta manera no serían viables, de ahí la importancia de su encapsulado óptimo.

Para reflejar la relevancia que están adquiriendo este tipo de pavimentos, actualmente se están colocando en muchas y diferentes localizaciones de nuestro país, por citar alguna destacable: la Plaza Mayor de Cáceres en Cáceres, la Puerta del Sol en Madrid, etc.

Estos son sólo dos ejemplos de la actividad investigadora buscando la innovación de nuestra empresa, colaborando íntimamente con instituciones tan importantes para la sociedad como la Universidad, enriqueciéndonos mutuamente, aportando y recibiendo, buscando un desarrollo global a través de la investigación, recurso que parece ser que hoy por hoy, pasa a un segundo o tercer plano por parte de las instituciones gubernamentales, retirando ayudas y reduciendo presupuestos para la investigación tanto pública como privada, ambas imprescindibles para salir de situaciones tan complicadas como la actual y evitar que se repitan, intentando generar un tejido industrial más robusto, que busque un equilibrio más sostenible, menos dependiente y versátil que, de sobra es conocido, tiene una relevancia enorme en la riqueza económica de un país.


Fuente información e imagen: Antonio Vallejo. Morteros El Sol. Kolasol.