Plaza de España, 1

  926 241 111

  9:00 a 14:00 horas. Lunes a viernes

Con un empate a 22 tantos y disputado el pasado fin de semana.

Crónica del partido entre el CDU Granada y Arlequines Miguelturra.

La vida de un entrenador es como la vida misma. Hay momentos duros en los que desearías dejarlo todo; te cambian por un partido retransmitido de "Champion League", el frio o la lluvia deja tus entrenos mermados de jugadores, las planificaciones tienen que ser reconstruidas una y otra vez. Si te focalizas en todos esos obstáculos, nunca podrías levantar cabeza.

Llevamos casi 20 años en la brecha. Veinte años, que se dicen pronto. Han sido muchas las veces en las que hemos estado a punto de dejarlo todo, de ser "normales". Sin embargo, un jugador de rugby no puede ser "normal". No elige su destino, el destino le elige a el. Y nuestro destino era, y es, luchar. Por eso nunca nos vinimos abajo. Por eso le dimos la misma importancia a entrenar con 5 jugadores que con 50. Por eso cambiamos de ciudad, apartando a los que ponían trabas y entregándonos a los que sumaban.

Llevamos 2 temporadas en Miguelturra. Dos temporadas donde hemos visto colmada nuestra pasión: practicar y hacer llegar este deporte a cuantos más mejor.

Hemos creado una escuela deportiva en colaboración con el Ayuntamiento. Se ha constituido un equipo masculino sub20. Tenemos un equipo sénior femenino y un equipo sénior masculino. Por primera vez en nuestra historia hemos disputado la liga de segunda regional en la federación andaluza de rugby en categoría masculina y una liga de promoción en categoría femenina.

Desde el pasado mes de Noviembre hemos disputado 10 partidos de liga, con un balance de 8 victorias, 1 empate y 1 derrota.

Cuando el pasado domingo saltábamos al campo, no podía haber presión por tener la necesidad de ganar algo. Nuestros números eran ya la recompensa a una gran temporada. Pero nosotros no elegimos nuestro destino.

Un campo en unas condiciones aceptables y un rival herido, peligroso, que luchaba por seguir vivo en la competición. Una plaza en la final como premio. Un partido de máxima igualdad donde los pateadores parecían acordado fallar todo para que el partido se decidiera en el cuerpo a cuerpo.

El marcador se alternaba y los jugadores parecían ajenos a la tensión de la grada. Cuando estás en mitad de una batalla no oyes a tu general, luchas por sobrevivir. La sangre ciega tus ojos, tu respiración ahoga tus oídos y solo respondes a tus instintos.

Con el marcador igualado a 15, a 2 minutos del final, nuestro rival nos atesta un golpe mortal de necesidad. Ensayo de Granada. La temporada pasa ente nuestro ojos como una película a cámara rápida, desvaneciéndose delante de nosotros. "Vamos a morir en la orilla" parece ser el pensamiento que cruza la cabeza de todo el equipo mientras el balón cruza nuestra portería para sumar 2 puntos más de la transformación. Teníamos una renta de 4 puntos en la eliminatoria y ahora, a 2 minutos del final, estamos 3 puntos por abajo.

Pero no lo olvidéis, somos jugadores de rugby. No elegimos nuestro destino y nuestro sino es luchar. Abrazados a nuestro juego, nos lanzamos a la desesperada a tratar de transmitir el balón para ir a campo contrario. Un agrupamiento, un "pick and go", balón fuera, un pase, una carrera, unas fintas, un placaje, una transmisión y un hueco en la defensa, …. silencio …. esperanza…… Ensayo!!!.

El peso de una ilusión desaparece de nuestros hombros dando lugar a un final de partido inolvidable el resto de nuestra vida.
El próximo fin de semana jugaremos la final de la liga con una plaza ya en la primera regional andaluza. Un sueño o simplemente nuestro destino, como queráis verlo.


Fuente información: Rodrigo Moraleda Novo (Arlequines Miguelturra).