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  9:00 a 14:00 horas. Lunes a viernes

Combinan su deporte favorito con otras actividades de ocio como la piscina.

Continúa el Campus de Fútbol de Miguelturra con su rutina de entrenamiento.

El Campus de Fútbol de Miguelturra llega a su ecuador con una rutina de entrenamientos unas horas de ocio para los chavales que cada disfrutan más de su deporte favorito. A primera hora de la mañana, sobre las 8.05 horas los monitores despiertan a los alumnos que se quedan internos, aunque ya en la noche y tal y como cuentan ellos mismos han tenido que realizar una redada requisando algunos utensilios para pintar. Después van al Complejo Deportivo, para desayunar zumos naturales, leche, magdalenas, cereales, galletas de chocolate, etc. todo lo necesario para un buen rendimiento.

Sobre las 9:30 horas empiezan todos los grupos a trabajar realizando su sesión de educación física de base, pasando a continuación a realizar trabajo técnico / táctico y algunos juegos, para animar a algunos alumnos.

A las 11 horas descansan, beben líquidos, agua sobre todo, para hidratarse, que es importante ya que se suda mucho y se pierden líquidos.

A continuación se continua con el trabajo técnico/táctico y sobre la sobre las 12:30 horas se trasladan a la piscina municipal, para refrescarse y descansar del entrenamiento. Este año el color de la toalla es morado, con lo que en un simple vistazo se ven en donde se ubican los alumnos...

A las 13.45 horas empiezan a reagruparse para ir a comer. Este año como novedad no van a estar esperando dos grupos para comer. La mitad del grupo irá a comer al Ganadero y la otra mitad a la Parra.

Generalmente y salvo excepciones, los menús están preparados para que la mayoría de los alumnos coman, ya que es muy difícil acertar con tantos niños a que a todos les guste la comida. Después de comer reparten por grupos, para realizar actividades en las distintas aulas, hasta que vayan a la piscina.

A las 17 horas aproximadamente se van a la piscina a darse un baño y refrescarse. Además aprovechan para comprarse, algún polo o alguna chuchería.

A las 19.30 horas aproximadamente después del baño, vuelven al entrenamiento. Realizando ejercicios, juegos de entretenimiento y a echar un partidillo, que generalmente es lo que más les gusta.

Sobre las 10 horas, ha terminado la jornada, y los externos les esperan sus padres para llevarlos a casa y los internos a Cenar. A algunos se les nota que el día ha sido largo y están cansados incluso a algunos se les ha pegado el sol. Es conveniente que se lleven cremas protectoras para el sol, y los padres conciencien a sus hijos que se deben echar crema, sobre todo por la cara.
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