Concluyen las obras de acondicionamiento de la calle Misericordia.
El pasado 14 de agosto se abría definitivamente al tráfico rodado la calle Misericordia, tras las obras de mejora de accesibilidad y movilidad, acometidas en el vial desde el pasado mes de junio.
El concejal de Desarrollo Sostenible, Julián Céspedes, ha explicado que las obras han sido ejecutadas de forma directa por el Área de Obras del Ayuntamiento y reforzadas con personal de los Planes de Empleo, en este caso del Plan Especial de Empleo 2013-2014 de la Diputación Provincial y el Plan de Empleo Municipal 2014.
Según el edil, las obras han consistido en la ampliación del acerado del lado izquierdo de la calle para así dotarla de la suficiente amplitud que necesitan las personas con movilidad reducida, "salvando el difícil escollo que suponía en la zona el estrangulamiento de la calle en la cercanía del cruce con calle Soledad y que dejaba más de 20 metros de calle prácticamente sin acerado".
A su vez, se han adaptado los cruces con calles Ciruela y Lentejuela, se han ampliado el número de sumideros para aguas pluviales y se ha cambiado la iluminación por otra más eficiente. La obra ha concluido con la señalización horizontal de la zona y la próxima instalación de mobiliario urbano.
Englobadas dentro de la continua mejora de viales que se están acometiendo en los últimos años, Céspedes ha señalado cómo la obra se enmarca dentro del plan de mejora de accesibilidad y movilidad de los viales más relevantes y más necesitados de reforma de la localidad, plan que intentará tener continuidad en los próximos meses en el importante eje de comunicación del centro de la localidad, que va desde la plaza de la Constitución hasta la calle Pozuelo, el cual soporta un elevado tránsito de personas y vehículos y en el que la calle Misericordia se convierte en el primer tramo reformado.