Concluye La Exposición EL OTRO MUNDO.
Alrededor de 600 personas, tanto de Miguelturra como de localidades vecinas, han visitado la exposición “El otro mundo” que ha sido clausurada a principios de semana. La exposición, que anteriormente ya había pasado por las dependencias del instituto de enseñanza secundaria “Campo de Calatrava” de la localidad, ha permanecido en el Salón de Usos Múltiples del Ayuntamiento por espacio de un mes, durante el que se han recibido una media de 20 visitantes por día, que se ha visto incrementada a 40 - 50 personas de media por día durante los fines de semana.
Se trata de la exposición más larga que ha tenido lugar en el municipio y los datos en lo que respecta al número de visitantes reflejan la gran aceptación por parte del público. Miguelturra ha sido el primer municipio en el que se ha expuesto “El otro mundo” y está previsto que continúe su recorrido por diversas localidades de Castilla la Mancha, en principio parece ser que su próximo destino será el Museo de las Ciencias de Cuenca.
El concejal de nuevas tecnologías del Ayuntamiento de Miguelturra, Agapito Arévalo mostraba su satisfacción por los buenos resultados obtenidos y el interés que ha despertado en numerosos municipios. Además, agradecía a todas las instituciones implicadas y a los profesionales el esfuerzo realizado para poner en marcha esta exposición, “hemos tenido la gran suerte de contar con un excelente equipo de profesionales que han hecho posible este proyecto”.
Esta aventura de la ciencia, la tecnología y la divulgación científica y cultural ha sido posible gracias a la colaboración mantenida entre el Ayuntamiento de Miguelturra a través del área de nuevas tecnologías, la consejería de ciencia y tecnología de la junta de Comunidades, el centro de instrumentación científica, análisis y tecnología (CICAT) de la Universidad de Castilla la Mancha y la Fundación Ínsula Barataria.
“El otro mundo” muestra casi cien fotografías, con distintas profundidades y ampliaciones, realizadas a través de un microscopio electrónico de barrido, de objetos tan cotidianos como el pelo humano, el tejido de una toalla, un cepillo de dientes, un pantalón vaquero, el filtro de un cigarro, el ala de una mosca, etc, en 47 paneles (de los que 45 son fotográficos y dos de carácter informativo).
El profesor Anselmo Acosta Echevarría, director del CICAT, definía que a través de la microscopia de barrido “pueden determinarse numerosas texturas que el ojo humano no puede percibir a simple vista, tal circunstancia constituye un aspecto de gran importancia en la investigación, dado el enorme potencial que implica, puesto que de a conocer nuevas propiedades o comportamientos de los materiales”.
Esta no es la primera colaboración que se mantiene entre el área de nuevas tecnologías de Miguelturra y el centro de instrumentación Científica, Análisis y Tecnología de la Universidad de Castilla la Mancha, sino que recientemente se realizaba un análisis de la estructura de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, en un reportaje que se mostraba en las páginas del segundo número de la revista “Miguelturra en Red”.
