Clausura de la Escuela Taller Amelgares.
Tal y como se recogía en el proyecto inicial de la Escuela Taller sus alumnos han finalizado la construcción de un “Vivero de empresas”, situado en el polígono industrial “Santísimo Cristo”, en la calle Arrieros esquina Amelgares, sobre una parcela de 1.500 m2 de suelo municipal. Está compuesto de un total de cinco naves industriales, de alrededor de 200 m2 cuatro de ellas y la última de dimensiones un poco mayores, y un edificio de oficinas en el que se distinguen cinco despachos para otras tantas empresas locales que sólo necesiten de una sala para el desempeño de su actividad laboral. A lo largo de estos meses de construcción, de la nueva infraestructura los alumnos y sus monitores se han encargado de realizarlo todo, salvo la instalación eléctrica: desde la explanación y replanteo hasta la cimentación y el alzado de la estructura.
Durante el acto de clausura celebrado en el nuevo “Vivero” el director de la Escuela Taller, José Antonio Sancho, remarcó la evolución experimentada durante estos dos años por los alumnos, “han madurado con nosotros”, realizando un balance muy positivo de una experiencia de la que destacó “la confianza y el apoyo” prestado desde el consistorio local. Por su parte, el alcalde de Miguelturra, Román Rivero, valoró como muy importante el esfuerzo de alumnos y monitores para lograr concluir la obra de construcción del vivero así como “la cualificación profesional” lograda por los jóvenes, a los que auguró un rápido acceso al mercado laboral.
Francisco Rueda tuvo palabras de elogio para “la calidad” de la construcción señalando que a pesar de haber supuesto para las instituciones que han financiado el proyecto una inversión económica muy alta “el dinero está bien invertido y es doblemente barato”, en alusión a la formación recibida por los jóvenes y a la infraestructura creada que servirá para que nuevos empresarios de Miguelturra puedan desarrollar su actividad.
Durante estos dos años de existencia la Escuela Taller Amelgares ha contado con tres módulos (carpintería, carpintería metálica y albañilería) con un total de doce alumnos en cada uno. Según sus propios responsables, aunque la movilidad de los asistentes ha sido mayor en el módulo de albañilería no se ha tenido en ningún momento problemas para cubrir todas las plazas. Desde diciembre de 2002 numerosos han sido los jóvenes del municipio que han pasado por la E.T., con edades comprendidas entre los 16 y los 25 años, y, según datos revelados por Mª Victoria Sobrino, con un porcentaje del 40% de los que ya han podido obtener un empleo, antes incluso de concluir definitivamente la experiencia.
Durante el acto de clausura celebrado en el nuevo “Vivero” el director de la Escuela Taller, José Antonio Sancho, remarcó la evolución experimentada durante estos dos años por los alumnos, “han madurado con nosotros”, realizando un balance muy positivo de una experiencia de la que destacó “la confianza y el apoyo” prestado desde el consistorio local. Por su parte, el alcalde de Miguelturra, Román Rivero, valoró como muy importante el esfuerzo de alumnos y monitores para lograr concluir la obra de construcción del vivero así como “la cualificación profesional” lograda por los jóvenes, a los que auguró un rápido acceso al mercado laboral.
Francisco Rueda tuvo palabras de elogio para “la calidad” de la construcción señalando que a pesar de haber supuesto para las instituciones que han financiado el proyecto una inversión económica muy alta “el dinero está bien invertido y es doblemente barato”, en alusión a la formación recibida por los jóvenes y a la infraestructura creada que servirá para que nuevos empresarios de Miguelturra puedan desarrollar su actividad.
Durante estos dos años de existencia la Escuela Taller Amelgares ha contado con tres módulos (carpintería, carpintería metálica y albañilería) con un total de doce alumnos en cada uno. Según sus propios responsables, aunque la movilidad de los asistentes ha sido mayor en el módulo de albañilería no se ha tenido en ningún momento problemas para cubrir todas las plazas. Desde diciembre de 2002 numerosos han sido los jóvenes del municipio que han pasado por la E.T., con edades comprendidas entre los 16 y los 25 años, y, según datos revelados por Mª Victoria Sobrino, con un porcentaje del 40% de los que ya han podido obtener un empleo, antes incluso de concluir definitivamente la experiencia.
