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  9:00 a 14:00 horas. Lunes a viernes

Dentro de la programación navideña organizada por el área de Cultura del Ayuntamiento de Miguelturra

Cine Infantil en la Casa Municipal de Cultura

El cine infantil y juvenil vuelve a ser protagonista un año más durante las vacaciones navideñas de los más pequeños, con dos citas incluidas en la programación del área de Cultura del Ayuntamiento para estas fechas.

Ayer jueves, 27 de diciembre, el turno era para la película "Descubriendo a los Robinsons" que se proyectaba en la Casa de Cultura, a partir de las 17:30 horas. Hoy viernes, 28 de diciembre, los niños y niñas de Miguelturra tendrán la oportunidad de disfrutar, también en la Casa de Cultura y a la misma hora, de las aventuras de un pingüino excepcional en "Happy Feet".

Happy Feet es una película de animación 3D producida en Australia y estrenada a finales de 2006. Dirigida por George Millar, fue producida en los estudios Animal Logic, especialistas en efectos visuales y animación. Si bien la película es totalmente animada en 3D, algunas escenas incluyen actores humanos filmados.

Cuenta la historia del pingüino emperador Mumble, que, a diferencia al resto de su especie, no sabe ni puede cantar y aunque es dueño de un gran talento para el baile se ve excluido por el resto de la colonia, lo que le impide atreverse a declarar su amor por Gloria y decide irse.

En su camino se encuentra a un pequeño grupo de pingüinos con acento latino que al ver su habilidad para el baile le toman gran consideración y aprecio. Le hablan del Doctor Amor, un gordo pingüino que se dice acreedor de poderes místicos que le son transmitidos por un collar (que es simplemente el plástico de un pack de latas) que lentamente lo está ahogando.

Mumble se decide a ayudarlo y se dirige hacia donde el Dr. Amor consiguió el collar. Finalmente Mumble, sus amigos y el Dr. Amor llegan al lugar y en esa costa descubren a los grandes barcos que se llevan los peces y están provocando escasez y dificultades a los animales.

Tras recorrer largas distancias es capturado y encerrado en un acuario donde intenta comunicarse con los humanos para hacerles entender lo que está causando que ellos se lleven los peces pero no logra llamar su atención, hasta que se pone a bailar.

Al notar este comportamiento extraño para un pingüino los humanos lo devuelven a su colonia donde Mumble insta a todos sus iguales a bailar para así lograr que los humanos entiendan que algo está mal. De esta manera logra no sólo el amor de Gloria sino también la aceptación de los suyos.