El Ayuntamiento de Miguelturra aprueba un nuevo convenio colectivo para sus trabajadores.
El Pleno de la Corporación Municipal fue el encargado de dar el visto bueno, con el voto favorable del partido socialista y la abstención del partido popular, al documento que el equipo de gobierno y los representantes de los trabajadores municipales, tanto funcionarios como laborales, han venido negociando en los últimos meses. Ambas partes han calificado el acuerdo como "muy bueno" por las mejoras que supone para los empleados municipales en cuestiones como por ejemplo las facilidades dadas para lograr una conciliación real de la vida familiar y laboral.
Fuentes municipales destacan del convenio aprobado por el pleno, y firmado en su día por los representantes de todas las centrales sindicales, sus mejoras sociales, incidiendo en aspectos como el hecho de impedir que ningún trabajador vea mermados sus ingresos mensuales por motivos de baja laboral. Uno de los objetivos perseguidos por el documento es garantizar la salud laboral y la seguridad de los trabajadores en sus puestos de trabajo y la potenciación de la "maternidad" y la "paternidad", en sus artículos 27 y 28, además de su apuesta por la conciliación de la vida familiar y laboral, con medidas recogidas en sus artículos 14, 15, 16, 17 y 18.
Durante la sesión plenaria el Alcalde de Miguelturra, Román Rivero, defendió las características sociales del nuevo acuerdo marco que procura garantizar aspectos como "la estabilidad", "la promoción" y la "equiparación salarial" de laborales y funcionarios. En este último sentido afirmó que el consistorio ha hecho un "gran esfuerzo económico" para actualizar los salarios de los trabajadores municipales -el gasto de personal es el capítulo que más crece en el presupuesto municipal de 2006-, asegurando que el resultado de la negociación resulta beneficioso para los empleados y que "no hay otro igual en la provincia; es un buen convenio".
El texto establece además la persecución del acoso sexual y asegura los derechos a cualquier matrimonio, independientemente de su religión o derecho civil, impide la discriminación por razón de sexo, apoya la formación y el perfeccionamiento de los empleados públicos y asiste jurídicamente a los trabajadores en el desarrollo de sus funciones, estableciendo además un seguro de accidentes y vida.