La Asociación de Ayuda al Pueblo Saharaui elaborará un reportaje del arte en los campamentos de refugiados de Tindo
La asociación de ayuda al pueblo saharaui de Ciudad Real, en colaboración con la excelentísima Diputación de Ciudad Real, la agencia de comunicación COMSOLIDAR, el ministerio de cultura saharaui y la coordinadora estatal CEAS - Sahara realizarán durante las vacaciones de navidad un reportaje sobre el arte en los campamentos de refugiados saharauis de Tindouf, para ofrecer a la ciudadanía una visión cercana del conflicto con el pueblo saharaui, desde la perspectiva de las manifestaciones artísticas.
Los hombres, mujeres y niños del Sáhara Occidental han vivido refugiados durante 33 años en una de las regiones más inhóspitas del mundo. Cuando llegaron a esta región, donde la temperatura en verano supera los 50 grados a la sombra y en invierno el frío llega a congelar, no encontraron nada más que arena. Únicamente gracias a la sólida estructura organizada y a los grandes sentimientos de solidaridad, característicos de este pueblo, fueron capaces de construir una sociedad organizada en este desierto.
Todos los esfuerzos han sido realizados para poner en marcha un sistema de vida podríamos decir "normal" dentro de lo posible bajo las difíciles circunstancias. Todas las disposiciones han sido llevadas para sobrevivir durante un eventual pero largo tiempo en el desierto. A la vez, todas sus esperanzas se fundan sobre el esperanzador retorno a su propio país.
Lo que es relativamente nuevo, es la importancia dada al Ministerio de Cultura. El pueblo Saharaui cuenta con canciones, historias orales, dibujos y pinturas que perpetúan sus tradiciones y su historia a las generaciones más jóvenes. La guerra y la construcción de los campamentos han causado una ruptura en este ciclo. "Todos los ancianos que mueren son como una biblioteca que desaparece". El Ministerio de Cultura quiere maximizar las oportunidades que se dan a las generaciones jóvenes para ser competentes en este campo. El pueblo Saharaui debería estar preparado, después de la independencia, para desarrollarse utilizando elementos importantes tomados de su propia tradición y cultura.
Es en este punto donde APS Madraza encuadra su proyecto. Las manifestaciones artísticas en los campamentos de refugiados saharauis nacen de la defensa de su lucha interna contra el refugio y son una fuente bastante inexplorada aún que muestra al mundo los sentimientos de un pueblo que vive en el exilio más de tres décadas, de la forma más bella que existe, a través del arte.
El interés para España es crucial, no sólo por la responsabilidad ética que pesa sobre el país por el modo en el que se articuló la descolonización, sino porque a fecha actual y para las
Naciones Unidas, España sigue siendo el Estado administrador responsable. Sin embargo, la capacidad española para liderar las negociaciones de una salida pacífica al conflicto no es todo lo fuerte que se desearía. Además, España tiene una postura contradictoria en referencia al conflicto saharaui.
Mientras que en el seno de las Naciones Unidas se ha abstenido en las votaciones que se refieren a la dinamización de la solución del conflicto saharaui, en su Plan de Cooperación al Desarrollo (PACI) establece a la “población saharaui” como objetivo prioritario de la acción exterior española. Desde la perspectiva del análisis político, este hecho supone una fuerte contradicción que elude tomar parte en el conflicto político por las repercusiones que ello pueda tener para las relaciones hispano-marroquíes pero que intenta corregir con la presencia humanitaria en la zona donde se encuentran los refugiados.
Fuente información Saymi.
Los hombres, mujeres y niños del Sáhara Occidental han vivido refugiados durante 33 años en una de las regiones más inhóspitas del mundo. Cuando llegaron a esta región, donde la temperatura en verano supera los 50 grados a la sombra y en invierno el frío llega a congelar, no encontraron nada más que arena. Únicamente gracias a la sólida estructura organizada y a los grandes sentimientos de solidaridad, característicos de este pueblo, fueron capaces de construir una sociedad organizada en este desierto.
Todos los esfuerzos han sido realizados para poner en marcha un sistema de vida podríamos decir "normal" dentro de lo posible bajo las difíciles circunstancias. Todas las disposiciones han sido llevadas para sobrevivir durante un eventual pero largo tiempo en el desierto. A la vez, todas sus esperanzas se fundan sobre el esperanzador retorno a su propio país.
Lo que es relativamente nuevo, es la importancia dada al Ministerio de Cultura. El pueblo Saharaui cuenta con canciones, historias orales, dibujos y pinturas que perpetúan sus tradiciones y su historia a las generaciones más jóvenes. La guerra y la construcción de los campamentos han causado una ruptura en este ciclo. "Todos los ancianos que mueren son como una biblioteca que desaparece". El Ministerio de Cultura quiere maximizar las oportunidades que se dan a las generaciones jóvenes para ser competentes en este campo. El pueblo Saharaui debería estar preparado, después de la independencia, para desarrollarse utilizando elementos importantes tomados de su propia tradición y cultura.
Es en este punto donde APS Madraza encuadra su proyecto. Las manifestaciones artísticas en los campamentos de refugiados saharauis nacen de la defensa de su lucha interna contra el refugio y son una fuente bastante inexplorada aún que muestra al mundo los sentimientos de un pueblo que vive en el exilio más de tres décadas, de la forma más bella que existe, a través del arte.
El interés para España es crucial, no sólo por la responsabilidad ética que pesa sobre el país por el modo en el que se articuló la descolonización, sino porque a fecha actual y para las
Naciones Unidas, España sigue siendo el Estado administrador responsable. Sin embargo, la capacidad española para liderar las negociaciones de una salida pacífica al conflicto no es todo lo fuerte que se desearía. Además, España tiene una postura contradictoria en referencia al conflicto saharaui.
Mientras que en el seno de las Naciones Unidas se ha abstenido en las votaciones que se refieren a la dinamización de la solución del conflicto saharaui, en su Plan de Cooperación al Desarrollo (PACI) establece a la “población saharaui” como objetivo prioritario de la acción exterior española. Desde la perspectiva del análisis político, este hecho supone una fuerte contradicción que elude tomar parte en el conflicto político por las repercusiones que ello pueda tener para las relaciones hispano-marroquíes pero que intenta corregir con la presencia humanitaria en la zona donde se encuentran los refugiados.
Fuente información Saymi.