La Agrupación Astronómica "acerca" el eclipse lunar a Miguelturra.
La Agrupación Astronómica de Miguelturra, en colaboración con el Ayuntamiento de la localidad, ha preparado una velada especial para la noche del sábado. Coincidiendo con el eclipse de luna que está previsto se produzca en las primeras horas del domingo 9, la asociación instalará en la Plaza de la Constitución un pequeño observatorio para "acercar" a todos los interesados el eclipse. Está prevista la instalación de telescopios aportados por la propia agrupación astronómica desde las 23,30 horas del sábado hasta las 2,30 de la madrugada del domingo.
No es la primera ocasión en la que la Agrupación de Miguelturra realiza un montaje público para facilitar el visionado de un eclipse, aunque en esta ocasión sus responsables mostraban preocupación por las previsiones meteorológicas para esas horas (en las que posiblemente un frente nuboso pueda atravesar el cielo de la provincia). Está previsto que el avistamiento del eclipse comience con la fase de la entrada en la umbra en torno a las 0,32 horas del domingo 9 de noviembre; el comienzo de la totalidad se producirá sobre las 2,07 horas, la mitad de la totalidad a las 2,08, el fin de la totalidad a las 2,30 horas y la salida de la umbra a las 4,05 horas.
Desde la propia Agrupación Astronómica de Miguelturra se anuncia que además de posibilitar el visionado del eclipse a través de los medios que se van a poner a disposición de los interesados, algunos monitores ofrecerán también información sobre las cuestiones que puedan interesar a los asistentes. En la actualidad los trabajos que viene realizando la Agrupación se están centrando en aspectos relacionados con el estudio de la fotografía astronómica.
El eclipse no es más que el oscurecimiento de un cuerpo celeste por otro. Como los cuerpos celestes no están quietos en el firmamento, a veces, la sombra que uno proyecta oculta al otro, por lo que éste último se ve oscuro. Un eclipse de Luna, en concreto, es un oscurecimiento de la Luna vista desde la Tierra, y ocurre cuando la Luna entra dentro del cono de sombra que la Tierra proyecta en el espacio. Para ello, la Luna tiene que estar en el lado opuesto de la Tierra al que se encuentra el Sol, ya que las sombras se proyectan en dirección contraria a la fuente de luz (el Sol, en este caso).
El eclipse del 9 de noviembre será total: la Luna se sumergirá por completo en la sombra que proyecta la Tierra. En el instante en que quede totalmente cubierta no se dejará de ver. Miembros de la Agrupación explicaban que la luna adquirirá un tono rojizo, consecuencia de los pocos rayos solares que aún le llegan.
No son rayos que inciden directamente desde el Sol (la Tierra no lo permite, pues se halla entre ambos astros), sino rayos refractados en la atmósfera terrestre. Los rayos rojos son los que menos se refractan, por lo que consiguen atravesar por completo el borde de la atmósfera terrestre y llegar hasta nuestro satélite la Luna.
Ésta vez la fase de totalidad durará muy pocos minutos, sólo 24, debido a que la Luna atravesará la sombra terrestre muy cerca de su borde inferior. También por ésta causa posiblemente la zona Sur de la Luna adquiera un mayor brillo que el resto. El que se oscurezca más o menos, y el tono rojizo (u ocre, o anaranjado) que adquiera, dependerá de la cantidad y calidad del polvo en suspensión que exista esa noche en la atmósfera terrestre.
No es la primera ocasión en la que la Agrupación de Miguelturra realiza un montaje público para facilitar el visionado de un eclipse, aunque en esta ocasión sus responsables mostraban preocupación por las previsiones meteorológicas para esas horas (en las que posiblemente un frente nuboso pueda atravesar el cielo de la provincia). Está previsto que el avistamiento del eclipse comience con la fase de la entrada en la umbra en torno a las 0,32 horas del domingo 9 de noviembre; el comienzo de la totalidad se producirá sobre las 2,07 horas, la mitad de la totalidad a las 2,08, el fin de la totalidad a las 2,30 horas y la salida de la umbra a las 4,05 horas.
Desde la propia Agrupación Astronómica de Miguelturra se anuncia que además de posibilitar el visionado del eclipse a través de los medios que se van a poner a disposición de los interesados, algunos monitores ofrecerán también información sobre las cuestiones que puedan interesar a los asistentes. En la actualidad los trabajos que viene realizando la Agrupación se están centrando en aspectos relacionados con el estudio de la fotografía astronómica.
El eclipse no es más que el oscurecimiento de un cuerpo celeste por otro. Como los cuerpos celestes no están quietos en el firmamento, a veces, la sombra que uno proyecta oculta al otro, por lo que éste último se ve oscuro. Un eclipse de Luna, en concreto, es un oscurecimiento de la Luna vista desde la Tierra, y ocurre cuando la Luna entra dentro del cono de sombra que la Tierra proyecta en el espacio. Para ello, la Luna tiene que estar en el lado opuesto de la Tierra al que se encuentra el Sol, ya que las sombras se proyectan en dirección contraria a la fuente de luz (el Sol, en este caso).
El eclipse del 9 de noviembre será total: la Luna se sumergirá por completo en la sombra que proyecta la Tierra. En el instante en que quede totalmente cubierta no se dejará de ver. Miembros de la Agrupación explicaban que la luna adquirirá un tono rojizo, consecuencia de los pocos rayos solares que aún le llegan.
No son rayos que inciden directamente desde el Sol (la Tierra no lo permite, pues se halla entre ambos astros), sino rayos refractados en la atmósfera terrestre. Los rayos rojos son los que menos se refractan, por lo que consiguen atravesar por completo el borde de la atmósfera terrestre y llegar hasta nuestro satélite la Luna.
Ésta vez la fase de totalidad durará muy pocos minutos, sólo 24, debido a que la Luna atravesará la sombra terrestre muy cerca de su borde inferior. También por ésta causa posiblemente la zona Sur de la Luna adquiera un mayor brillo que el resto. El que se oscurezca más o menos, y el tono rojizo (u ocre, o anaranjado) que adquiera, dependerá de la cantidad y calidad del polvo en suspensión que exista esa noche en la atmósfera terrestre.
