El 43 por ciento de los españoles en redes sociales no protege su perfil.
En España hay unos ocho millones de usuarios de redes sociales (un 44,6 por ciento del total), según datos del Instituto Nacional de Tecnologías de Comunicación (INTECO), y un 43 por ciento de ellos permite el libre acceso a su perfil, donde puede haber aportado información delicada, como ideas políticas, orientación sexual, creencias religiosas o fotografías suyas y de terceros.
Hay riesgos para la privacidad en el registro en una red social, porque la mayoría, por defecto, permiten que la información sea compartida indiscriminadamente, en lugar de establecer automáticamente el nivel más alto de protección, dijo Artemi Rallo, presidente de la AEPD.
"Si el usuario no modifica el diseño original que ofrece la red social, la plataforma está preparada para que toda la información sea compartida por todos", indicó Rallo en una rueda de prensa conjunta con el director general de INTECO, Enrique Martínez.
La AEPD y el INTECO recomiendan a las redes cambiar esta política y simplificar las cláusulas de privacidad de forma que sean comprensibles para el usuario medio y que éste pueda ser consciente de lo que implica su comportamiento: por ejemplo que en muchas redes se ceden los derechos de autor durante un periodo de hasta cinco años.
"El usuario tiene que se consciente que cuando cuelga algo en la red puede tener un mayor recorrido de lo que pensó", dijo Enrique Martínez, director general de INTECO.
La mayoría utiliza estas redes para compartir fotos - un 70,9 por ciento -, enviar un mensaje privado - 62,1 por ciento - o comentar fotos de amigos - un 55 por ciento.
Por ello, las dos instituciones aconsejan no publicar excesiva información personal - ni datos que permitan la localización física - y no aceptar contactos que no se conozcan previamente.
REDES SOCIALES Y MENORES.
Además de los muchos detalles personales que se introducen - voluntariamente - al darse de alta, el uso de la red también puede conllevar otros problemas: la indexación automática de perfiles que hacen algunas redes sociales en los motores de búsqueda, permitiendo un acceso mucho más amplio de los datos, la publicidad acorde a los gustos del usuario, o una eventual suplantación de identidad.
De hecho, la AEPD ya ha recibido una denuncia de suplantación de la identidad en el ámbito escolar, un aspecto especialmente espinoso porque, por ley, no se pueden obtener datos personales de menores de 14 años.
"En la mayor parte de las redes hay un gran número de usuarios con menos de 14 años que burlan los límites legales", dijo Rallo, y que suministran datos familiares y personales. El estudio solicita a las redes que pongan en marcha herramientas para controlar la edad.
Por último, darse de baja de una red social no es un proceso fácil, agregaron, y la mayoría de las redes cuenta con complejos trámites de cancelación, que a veces distinguen entre desactivación del perfil y eliminación de la información del usuario.
Las redes no han aclarado qué uso hacen de los datos recabados ni han concretado durante cuánto tiempo los guardan.
El estudio ha sido elaborado con encuestas a casi 3.000 usuarios de internet mayores de 15 años y entrevistas a profesionales de diversos ámbitos.
Fuente información Reuters.